Aragón está tratando de posicionarse para ser un referente en la captación de dinero del fondo europeo de reconstrucción, del que España espera recibir en torno a 140.000 millones de euros (72.700 en forma de ayudas directas). El Ejecutivo autonómico ha confeccionado una lista con una treintena de propuestas susceptibles de ser financiadas con esta partida, entre las que destacan las impulsadas por cuatro grandes empresas locales. Se trata de Samca, Saica, Térvalis y Iberebro (Pikolín), cuyos proyectos suman inversiones por más de 100 millones de euros que encajan con los objetivos transición energética y digital que persigue el programa de reactivación económica impulsado desde Bruselas para paliar los efectos de la crisis del coronavirus.

Las iniciativas fueron presentadas esta martes en una jornada de trabajo organizada por la DGA y la patronal CEOE Aragón con el propósito de estimular el interés del empresariado para invertir con el posible apoyo de los incentivos comunitarios. La sesión fue inaugurada por el presidente, Javier Lambán, quien reconoció las «grandes expectativas» que generan estas ayudas, aunque advirtió que no serán «un cheque en blanco» ni fáciles de gestionar. «Europa no regala el dinero y pondrá condiciones que creo son razonables», apuntó, lo que consideró que debe servir de acicate par afrontar reformas estructurales «que hemos ido posponiendo de forma insensata».

Por ahora no se sabe cómo será el criterio de reparto de los fondos, aunque todo apunta a qué habrá una asignación por comunidades autónomas. Pese a ello, «por nosotros que no quede», aseveró Lambán, que apostó por tener hechos los deberes para cuando las ayudas europeas echen a andar. Para ello, la DGA trabaja en el diseño de una Agenda Aragonesa de Inversiones que, de la mando del Estado, permita impulsar la obra pública y el desarrollo logístico del territorio.

El presidente abogó también por aprovechar la actual crisis para resolver algunos de los problemas endémicos de la economía como es la excesiva carga burocrática y regulatoria. En este punto, recordó que su gobierno ultima un decreto para avanzar en la agilidad administrativa, pero afirmó que el mayor problema esta en la normativa estatal, que es «excesivamente rígida y protectora», algo que ha trasladado al presidente Sánchez para que derogue algunas medidas que son «antiproductivas y antiempresariales».

ALIAGA LLAMA A AGUDIZAR EL INGENIO

Por su parte, el vicepresidente, Arturo Aliaga, que clausuró la jornada, invitó a agudizar el ingenio con una máxima: la cofinanciación público-privada. «Hay que pensar en ecología, descarbonización, economía circular, transición agrícola, infraestructuras verdes, que es la tendencia que marca Europa», indicó. La clave para tener éxito, agregó, «es que seamos capaces de definir los proyectos». Al respecto, puso de relieve la buena experiencia que tiene Aragón en la gestión de fondos europeos como el Feder, en los que ha logrado ejecutar el 88% de los programas, frente al 33% de la media española.

En la misma línea, el presidente de CEOE Aragón, Ricardo Mur, hizo un llamamiento a las empresas y administraciones aragonesas para presentar «proyectos solventes y sólidos» a fin de lograr el máximo éxito en la captación de fondos europeos.

SAMCA APUESTA FUERTE POR EL PLÁSTICO RECICLADO

Los cuatro proyectos aragoneses presentados ayer giran en torno a los conceptos de economía verde, circular y digital. Entre ellos destaca el impulsado por Samca, a través de su filial Novapet, que apuesta por convertir a Aragón en líder europeo de la recuperación y el reciclaje del PET, el material plástico más reciclable y el único que se puede reutilizar para los envases alimentarios. La compañía quiere crear una red de agencias territoriales para multiplicar la recogida selectiva de este recurso, algo similar a lo que hace Saica con el papel.

También contempla la instalación en Zaragoza de una planta con capacidad para procesar de 30.000 a 40.000 toneladas del material y convertirlo en escamas, la materia prima para fabricar nuevamente el plástico. El tercer pilar del plan, denominado Re(nova)PET, pasa por adaptar tecnológicamente las fábricas de Novapet en Barbastro para producir PET reciclado a gran escala, hasta 100.000 toneladas anuales.