El Consejo de Ministros aprobó en su reunión de ayer la declaración de zona catastrófica en ocho comunidades autónomas afectadas por el temporal Filomena, entre ellas la de Aragón, con el objetivo de «agilizar» las ayudas. Así lo anunció la ministra portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, expresando al mismo tiempo que la declaración de zona afectada gravemente por una emergencia de protección civil también afectaba a la Comunidad de Madrid, Castilla La Mancha, Castilla y León, Andalucía, Asturias, La Rioja y Navarra.

Se cumple así con la petición de la Unión de Agricultores y Ganaderos de Aragón (UAGA), que hace unos días solicitaba esta medida para paliar los efectos de la borrasca en el olivar de Belchite, del Bajo Aragón y del Matarraña. El Ejecutivo central tomaba esta medida tras una primera valoración de los daños, si bien se pueden ampliar los territorios afectados según avance el estudio de esos perjuicios sufridos. Según Montero, aún no se ha podido precisar con exactitud los daños materiales y personales, por lo que se sigue trabajando en la elaboración de una memoria que recoja todos ellos.

En este contexto, desde el Gobierno autonómico se mandó un recado al Ejecutivo central junto con el agradecimiento por el interés para paliar las afecciones. «En Aragón ha nevado tanto o más que en la mayor parte del país por lo que en nuestro territorio se han producido unos daños evidentes en infraestructuras, equiparables a los de otros lugares del centro de la península», expresaron.

Por el momento, y hasta que se conozcan los detalles del reparto, la DGA explicó que a través de las diputaciones y los ayuntamientos, y a petición de la Delegación del Gobierno, van a colaborar en «el análisis y la valoración» de estas afecciones «tanto en infraestructuras públicas como en el sector privado».

«Queda mucho trabajo»

La evaluación por parte de UAGA, a través de su secretario general, José María Alcubierre, es positiva pero mantienen la cautela: «Lo principal es que la noticia se recibe de manera adecuada, pero falta mucho recorrido. Se ha escrito la letra gorda, y hay que estar pendientes de que la ayuda tiene que llegar a los profesionales que viven de la agricultura y viven en los pueblos», manifestó Alcubierre. «Contentos pero queda mucho trabajo», añadió.

Eso sí, señala que cuando se desarrolle el decreto todavía habría que ver si se ofrecerán ayudas fiscales o si son directas, que es lo que están reclamando desde el sindicato agrario, para paliar, principalmente, los daños en los olivares aragoneses. Aunque no es una afección puntual: «Los olivares no son un problema de un año, es de varios. Con los invernaderos, si no se hace algo, los hortelanos de Zaragoza acabarán teniendo problemas con las explotaciones», explicaron.

Por otro lado, el frío sigue presente en la comunidad. La Agencia Estatal de Meteorología anunció ayer aviso amarillo por nevadas en el Pirineo oscense entre las 12.00 y las 24.00 horas, así como aviso amarillo por temperaturas mínimas en la Ibérica zaragozana y las zonas de Albarracín y Jiloca, entre las 24.00 y las 09.00 horas.

Además, varios pueblos aragoneses continúan registrando las temperaturas más bajas del país. Las localidades turolenses de Bello, Calamocha y Santa Eulalia del Campo se encuentran entre las que notificaron ayer las temperaturas más bajas de España a las 6.30 horas, con -15,1, -12,5 y -11,7 grados, respectivamente. Asimismo, también tres carreteras aragonesas precisaron ayer el uso de cadenas, dos en Teruel y una en Huesca.