El producto de moda en Aragón se llama slowdriving (conducción lenta) y consta de 16 rutas diferentes para recorrer por la comunidad. Un concepto que une la filosofía slow o, lo que es lo mismo, la de disfrutar de la vida con calma y las ganas de descubrir parajes y lugares recónditos. Esto es lo que se va a vender estos días en Fitur, la feria de turismo más importante de España.

Para lograr la combinación de estos dos ideas, este año el diseño del estand de Aragón gira en torno a dos ideas: el de slowdriving y la naturaleza. Aunque estas dos serán las temáticas principales, también tendrá un especial peso el turismo familiar y las experiencias gastronómicas.

«Partiendo del slowdriving y la naturaleza, del gris de la carretera y el verde de los paisajes aragoneses, el estand, de formas sencillas pero dinámicas y sugerentes, simula un recorrido, a modo de carretera secundaria, con paradas en lugares emblemáticos de Aragón», explicó el consejero de Vertebración y Territorio, José Luis Soro.

Así, el diseño del estand propone recorrer rutas por carreteras para visitar lugares recónditos o escondidos y poco conocidos, pero de gran belleza y atractivo y que representan un plus diferencial para el turista. Un espacio que, además, permite descubrir Aragón de forma tranquila, disfrutando del paisaje y del patrimonio cultural, añadió.

Para incidir más en este concepto de slowdriving se ha preparado una actividad denominada Súbete al slowdriving y se realiza en colaboración con el concesionario de Harley Davidson de Zaragoza. Se instalarán dos llamativas motos para que el público se acerque a verlas y pueda hacerse fotos subidos a ellas y ataviados con elementos propios que evocan a las rutas moteras: cascos, gafas y chalecos. Enfrente de las motos habrá instalada una gran pantalla para mostrar los diferentes videos de las 16 rutas de slowdriving en Aragón, haciendo por tanto una promoción directa al público final.

RECORRIDOS

Para disfrutar de la naturaleza salvaje de la comunidad se ha instalado un túnel donde se experimentará una experiencia interactiva que permitirá viajar a algunos de los rincones más maravillosos de Aragón sin salir del propio estand. En su interior se podrá recorrer un sendero y gracias a unas gafas de realidad virtual se podrá vivir una experiencia 360º con las que se recorrerán tres de los paisajes más emblemáticos: el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, el desierto de Los Monegros o la Sierra de Armantes de Calatayud y el Paisaje Protegido de los Pinares de Rodeno.