El 1 de agosto se iniciarán las obras de reparación del talud de la margen izquierda del río Gállego, cuya inestabilidad amenaza con afectar al colector de vertido que lleva las residuales del entorno hasta la planta de La Cartuja. Las obras, adjudicadas por la mesa de contratación de la Sociedad Ecociudad de Zaragoza a la empresa Sumelzo, supondrá una inversión de 99.120 euros (sin IVA). Su duración estimada es de un mes y medio.

Los problemas se localizan en un tramo de alrededor de 100 metros en la margen izquierda del río. En concreto, en la zona comprendida entre el nuevo acceso norte a Zaragoza (A23) y el puente del ferrocarril de la empresa Torraspapel (La Montañanesa). Los daños se originaron con la avenida del río que se produjo a finales del 2012.

Tras dos años sin proceder a su reparación, la ejecución de las obras no puede retrasarse más y la intervención se ha convertido en "precisa" debido a la erosión que provoca la corriente, sobre todo cuando el caudal es elevado, en esta margen del río. En caso de no actuar a corto plazo se podría generar un desgaste pronunciado de las defensas y afectar, en consecuencia, en el colector provocando que el vertido de aguas sin depurar al cauce del Gállego.

Las obras diseñadas consistirán en la ejecución de la escollera de protección del talud en este tramo desde el lecho del cauce hasta al menos un metro sobre la cota en la que se sitúa la tubería de saneamiento, alcanzando una altura total de cuatro metros.

La escollera se conformará con bloques de piedra con un peso medio de 500 kilos. Una vez terminada, se ejecutará el talud, que se revestirá de tierra vegetal y poliamida y se sembrará para darle más protección. En último lugar, se saneará la parte del camino que se ha visto dañada por la erosión del talud.

Los trabajos, que cuentan con la autorización correspondiente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, se acometerán desde el cauce del río, por lo que ha sido preciso esperar a las fechas de estiaje.