El barrio contará con un nuevo centro de salud a final de año, que sustituirá al desbordado edificio actual. Sobre una superficie de 1.900 metros cuadrados, contará con 34 consultas y dará servicio a una población de 22.500 personas. "Es una buena noticia. Se ha retrasado mucho su construcción, pero si al final abre como dicen en diciembre, se notará la mejoría porque el actual está saturado", opina Eva Jiménez, presidenta de la Asociación de Vecinos Puerta Sancho. Otras asociaciones también se alegran, pero se tientan la ropa ante la previsión de apertura: "No me lo creo. En todo caso, luego dirán que no hay dinero para equipamiento", avisan desde la entidad Palacio de la Alegría. "Hablamos con médicos y enfermeros y no tienen claro que vaya a haber presupuesto para los aparatos", comentan desde la Sol Invicto. Desde la entidad Río Ebro recuerdan el problema de las listas de espera: "Hay retrasos de más de seis meses".