La Mesa General de Negociación de la Administración Pública ha dado hoy su visto bueno a las propuestas de reducción de la jornada laboral de 37,5 a 37 horas semanales y de incremento salarial para los años 2019 y 2020.

Según informa el Gobierno aragonés, la reducción de la jornada laboral, que ha contado con el apoyo de CCOO y UGT, se establecerá sin perjuicio del mantenimiento de la jornada de 39,5 horas para los los empleados públicos dotados con el complemento específico B.

La Mesa, que ha estado presidida por la directora general de Función Pública, Arantzazu Millo, ha dado también el visto bueno al incremento retributivo para los años 2019 y 2020.

"En un marco de diálogo social y negociación colectiva que permita seguir avanzando en la adopción de acuerdos para el desarrollo, mejora y armonización de las condiciones de trabajo en la administración aragonesa, y siempre que así lo permita la legislación básica estatal, la Mesa ha acordado, además, la generación de fondos adicionales del 0,25% para 2019 y del 0,30% para 2020", añaden las fuentes citadas.

En este mismo encuentro, los sindicatos han debatido con la representación de la administración autonómica lo relativo a las retribuciones de los empleados públicos en los casos de situación de incapacidad laboral por causa de enfermedad o accidente.

En relación a este punto, al personal funcionario, estatutario y laboral de la administración aragonesa se le reconocerá desde el primer día en situación de incapacidad laboral por contingencias comunes un complemento retributivo hasta alcanzar el cien por cien de las retribuciones ordinarias que se vinieran percibiendo en el mes de inicio de la incapacidad.

Por lo que respecta al permiso de paternidad, y tras la aprobación de la Ley 6/2018, de 3 de julio, de Presupuestos Generales del Estado para el año 2018, que recoge la ampliación de esta licencia de cuatro a cinco semanas, la Mesa de Negociación de ha dado el visto bueno a la aplicación de este permiso en el ámbito de la función pública aragonesa.

Los representantes sindicales del CSIF han abandonado la mesa de negociación tras calificar la propuesta del Gobierno aragonés de "tomadura de pelo" a los empleados públicos de la Comunidad.

En un comunicado, esta formación sindical considera que la propuesta "nace muerta debido a que está condicionada al cumplimiento del déficit, algo que, como el propio Ejecutivo reconoció ayer, no va a suceder".

CSIF expresa su voluntad de "no participar en esta tomadura de pelo a los empleados públicos aragoneses, que no van a ver reflejada ninguna de las medidas que se firmaron a nivel nacional y que sí se están aplicando en otras comunidades y en otras administraciones, aún sin cumplir el objetivo de deuda.