Los usuarios del transporte público de Zaragoza podrán realizar transbordos por espacio de una hora entre todas las líneas de bus por el precio de un solo billete. Así lo aseguró ayer la teniente de alcalde de Servicios Públicos, Carmen Dueso, quien anunció la desaparición paulatina del bonobús de cartón por una tarjeta chip inteligente --bautizada ya como tarjeta bus-- que permitirá implantar el billete hora después de quince años de reivindicaciones y promesas políticas.
En la presentación del nuevo servicio, el alcalde, Juan Alberto Belloch, garantizó que tendrá "coste cero" para el viajero y el consistorio. Aunque se perderá facturación al beneficiarse del billete hora el 5,5% de los usuarios que ahora realizan transbordos, Belloch se mostró convencido de que se compensará con los incremento de usuarios que podría conllevar su aplicación.
Su opinión no fue compartida por el grupo del PP, que vaticinó un "aumento abusivo" del precio del billete o de la subvención que dedica el consistorio al transporte público. El edil popular Pedro Jato también criticó la ausencia de informes económicos que avalen la implantación del billete hora, así como la nula información facilitada a los grupos de la oposición.
Como ya informó este diario, el billete hora se implantará ya este verano de forma experimental en la lanzadera que comunica la urbanización Parque Goya II con el Actur. Los viajeros podrán realizar transbordos con las líneas 20, 23, 29, 35, 42, 43, 44 y 50.
La teniente de alcalde explicó que los viajeros deberán desembolsar dos euros "en depósito" para adquirir la tarjeta bus, que se recuperarán al devolverla. La pretensión es que no se tiren dado su valor y su vida media, de entre dos y tres años.
300 PUNTOS DE RECARGA Los usuarios podrán recargar el saldo hasta un máximo de 60 euros en más de 300 quioscos y oficinas de la CAI. Esta cuestión también fue criticada por el PP, apuntando que ahora se pueden adquirir bonobuses en 750 puntos.
El funcionamiento de la tarjeta bus será muy sencilla: con sólo pasarla por los lectores que llevarán los autocares se descontará el precio del billete. La máquina dejará ver el saldo en un pantalla y aplicará la tarifa que se cargue cada año, por lo que los usuarios se evitarán el canjeo del bonobús. "Esperemos que las colas de enero pasen a la historia", indicó el gerente de TUZSA, Antonio González, durante la explicación de la tarjeta bus.
González señaló que la tarjeta inteligente supondrá un "ahorro" de 50 millones de las antiguas pesetas respecto al actual sistema del bonobús de cartón. La diferencia de coste, dijo, reside en el elevado gasto de mantenimiento de las actuales máquinas, "que ya están obsoletas".
El jefe del servicio de Movilidad Urbana, Antonio Ramos, destacó en su intervención la "importancia extraordinaria" de la tarjeta bus para mejorar el transporte público en la ciudad, dado que se convierte en una "herramienta" para poder "reorganizar" la red de transporte.
