Los bomberos de la Diputación de Zaragoza han tenido que realizar una quincena de salidas desde la pasada noche por incidencias relacionadas con el fuerte viento que está soplando en la provincia.

Fuentes de la institución provincial apuntan que en todos los casos han sido intervenciones por la caída de árboles, ramas y otros elementos, pero que no se han producido heridos ni daños materiales graves.

En Tarazona ha habido que retirar varios árboles, un nido de cigüeñas y un cable eléctrico desprendido en la carretera de Cunchillos, mientras que en Bulbuente, un árbol ha caído sobre la gasolinera situada junto a la N-122, y en el monasterio de Veruela también se han desprendido varios árboles y ramas.

En Arándiga, el viento ha arrancado un tejado y lo ha desplazado hasta la carretera, y también ha habido desprendimientos en Calatayud y en Illueca.

En Paracuellos de la Ribera ha habido que retirar un árbol caído en la carretera CV-901.