Un incendio y 25 días de huelga después, el Ayuntamiento de Zaragoza ha entrado por fin en el conflicto abierto entre FCC Parques y Jardines y sus trabajadores. y lo ha hecho para intentar apaciguar los ánimos de los huelguistas. La concejala de Servicios Públicos, Natalia Chueca, despejó ayer una de las incógnitas que más preocupaba al comité de empresa a la hora de continuar el paro indefindo. En una rueda de prensa convocada por sorpresa, Chueca garantizó que uno de los futuros lotes en los que se dividirá el servicio de mantenimiento de los Parques y Jardines, que pasará a denominarse Infraestructura Verde, podrá asumir por su tamaño a la totalidad de la plantilla actual de la contrata.
Esta medida, la de no dividir de los trabajadores de FCC, era una de las principales reivindicaciones de los sindicatos. Con este anuncio prematuro -la concejala esperaba anunciar su decisión sobre la partición de los lotes más adelante- el consistorio quiere tranquilizar los ánimos enturbiados entre los trabajadores y la empresa. «Ahora la responsabilidad es suya. Tendrán que sentarse a negociar sobre el convenio y sus condiciones laborales, en lo que yo creo que tampoco hay tanta distancia entre las partes», dijo Chueca.
SATISFACCIÓN
La reacción de los jardineros, que por la mañana volvieron a recorrer el centro de la ciudad, no se hizo esperar. Fuentes del comité reconocieron su satisfacción por la noticia, ya que «esa era una de las tres patas principales» de su lucha. Desde el inicio, estos reclamaban como condición para desconvocar los paros que se firmara ya un convenio colectivo entre las partes, que les devolviese el poder adquisitivo perdido en los últimos años. También que se incluyeran en este cláusulas sociales y que la plantilla actual de FCC no se dividiese en diferentes y futuros lotes, lo que precisamente Chueca descartó ayer.
En todo caso, la jugada de la concejala no deja de ser llamativa. El mantenimiento de los parques de Zaragoza se llevaba a cabo hasta ahora por dos contratas diferentes y una sociedad municipal. Esta última se encargaba de atender el Parque del Agua. La margen izquierda del Ebro la tiene encargada la empresa Umbela, y la derecha, FCC, que es la más grande y la que se lleva el 70% del presupuesto.
En la actualidad, las licitaciones de estos contratos están caducadas, por lo que el ayuntamiento debe sacar a concurso de nuevo estos lotes, incluido el del Parque del Agua. Pues bien, en un primer momento, Chueca se mostró favorable a dividir estos lotes en más partes, a pesar de la oposición de la plantilla, que perdería fuerza sindical al repartirse en diferentes empresas y, a pesar también, de la existencia de un informe técnico contrario que según fuentes consultadas por este periódico se le presentó a la concejala.
Ahora, lo que Chueca anunció ayer implica una cosa y la contraria, ya que la conservadora explicó que va a reestructurar todo el sistema de mantenimiento y atención de la «infraestructura verde» de la ciudad, lo que significaría redibujar las zonas y crear nuevos lotes diferentes a los que existen hasta ahora. Es decir, sí que va a haber más lotes que antes, pero uno de ellos (y eso es lo que anunció ayer la edila) será lo suficientemente grande como para asumir a toda la plantilla actual de FCC Parques y Jardines. Ganan pues los trabajadores pero se mantiene también el criterio inicial de Chueca.
Esto es posible, según el ayuntamiento, gracias a que pueden jugar con más factores que hasta ahora porque todos los contratos han de renovarse. Además, han incrementado en más de 5 millones de euros la partida para las zonas verdes, y a partir de este año tendrán que asumir también el mantenimiento de nuevos espacios. El puzzle empieza a encajar.
