El director general de Salud Pública, Luis Gómez López, recomendó ayer mantener el consumo habitual de salmón y recordó la vigilancia autonómica, estatal y europea que de manera permanente se realiza a todos los productos alimentarios. El mensaje de tranquilidad se produce tras la alerta dada la semana pasada por la revista Science sobre los índices de contaminantes del salmón de piscifactoría, en una clara comparativa con el salvaje. Una noticia que ha calado en una parte del consumidor aragonés, a pesar del desmentido oficial del ministerio para el pescado comercializado en España.

Algunos puestos del Mercado Central han visto cómo sus ventas de salmón han descendido hasta un 50% desde que el viernes los medios de comunicación se hicieran eco de la noticia. En cambio otros aseguran no haber percibido ninguna reacción extraña en su clientela, caracterizada por un mayor poder adquisitivo.

"Las concentraciones de dioxinas y PCBs que aparecen en el estudio están muy por debajo de los límites tolerables fijados por las distintas organizaciones nacionales e internacionales", añade Luis Gómez, quien recuerda que la salud del consumidor, en cuanto a alimentación se refiere, se encuentra completamente protegida en Europa. "Aragón también forma parte de la red permanente de vigilancia alimentaria, que realiza muestreos y actuaciones preventivas que aseguren la salud".

Las razones de los expertos para desaconsejar el consumo del salmón no existen.