El Gobierno de Aragón ha confirmado que la curva de contagios ha comenzado a descender en las comarcas afectadas por el brote de coronavirus y que fueron relegadas a la fase dos. La consejera de Sanidad, Sira Repollés, y el director general de Salud Pública, Javier Falo, indicaron que la “evolución es favorable”, aunque no avanzaron ninguna fecha para la vuelta a la nueva normalidad. “Desde hace varios días vemos que los contagios son descendentes, pero eso no significa que no se puedan dar pequeños picos”, manifestó.

El Gobierno de Aragón señaló que el 6% de la población aragonesa (la de las comarcas del Cinca Medio, Bajo Cinca, La Litera y Bajo Aragón Caspe) concentra en este momentos el 67% de los casos positivos que se notifican en la comunidad. Sin embargo, como se ha repetido en varias ocasiones, corresponden a personas jóvenes y en su mayoría asintomáticos que no genera “estrés” para el sistema sanitario y en un foco “muy localizado”, según manifestó Repollés.

El Gobierno de Aragón también explica que se han realizado más de 1.000 pruebas de detección y que en los próximos días se van a seguir realizando entre 20 y 70 pruebas diarias en los centros de salud afectados.

Para calmar las críticas de algunos alcaldes sobre la falta de coordinación entre administraciones la consejera ha indicado que hoy mantendrán una reunión con los 40 alcaldes afectados para trabajar de forma conjunta en la solución. La portavoz adjunta del grupo parlamentario popular de las Cortes de Aragón, Mar Vaquero, ha pedido que se publiquen los datos de la incidencia por municipios. Ha apelado a la "lealtad institucional", demostrada por los consistorios durante el confinamiento, y el principio de cooperación para reclamar al Ejecutivo que abandone la "opacidad" y refuerce la "transparencia", descartando que la normativa de protección de datos impida publicar los datos por municipios, ya que "no se piden nombres, apellidos o historial clínico", sino números genéricos.

Por otro lado, el departamento de Sanidad ha elevado varios acuerdos al Consejo de Gobierno para la toma en conocimiento de distintas actuaciones llevadas a cabo para dotar de material y equipamiento la reserva estratégica del Servicio Aragonés de Salud en previsión de un rebrote epidémico.

Entre estas actuaciones, tramitadas de emergencia, se encuentran la adjudicación de un contrato para el suministro de 50 respiradores volumétricos y 20 humificadores generadores de alto flujo por 940.000 euros; 22 equipos digitales de radiología por un importe de 2.300.000 euros; un tercer contrato de 275.275 euros para suministrar 325 equipos de movilidad para video-consultas en los centros sanitarios con el fin de minimizar el impacto presencial de los pacientes en los mismos; y una cuarta adjudicación para la compra de 50 monitores y 300 bombas de infusión de varios tipos, con un importe de 175.750 euros.

En las últimas semanas, el Salud también ha tramitado por esta vía de emergencia la adquisición de material de protección como: más de 116.000 unidades de batas por 546.200 euros; 44.000 unidades de delantales de plástico por 1.600 euros; producto de base alcohólica de higiene de manos por 115.700 euros; y 5.000 unidades de protectores faciales antisalpicaduras por un importe de 12.850 euros.