El párroco de Épila, Miguel Ángel Barco, interpuso el pasado miércoles la denuncia por calumnias contra quien fuera su diácono durante dos años, Daniel Peruga. Ahora, las partes personadas están a la espera de que el Juzgado de la Almunia la admita a trámite. De hecho, desde la defensa del joven, ejercida por Enrique Trebolle, se destacó que Peruga todavía no ha dicho nada, por lo que no habría ningún delito. Por su parte, el abogado del párroco, Javier Osés, se reiteró en la inocencia del religioso y calificó de falsedad las acusaciones de abuso sexual.