La Guardia civil recogió ayer el cadáver de una persona de raza blanca, cuya identidad, sexo y edad no se pudo certificar, en la vía del tren que une Zaragoza con Pamplona, a la altura de La Joyosa. El maquinista de un convoy que se dirigía a Zaragoza y en el que viajaban 31 pasajeros, alertó al 112 de que había visto los restos de una persona en el trazado. El tren circulaba a poca velocidad.

Al lugar se trasladó la Guardia Civil de Pedrola, un médico forense del Juzgado de Instrucción nº 12 de Zaragoza, la Policía Judicial de Tarazona y efectivos del laboratorio de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de Zaragoza. El cadáver fue trasladado al Instituto Anatómico Forense de Zaragoza para su posible identificación. En el lugar no se encontró ningún tipo de documentación.