El Departamento de Asuntos Sociales de la Diputación General de Aragón pidió ayer a la Policía Nacional y Local y a la Fiscalía de Menores que localice a la mendiga rumana Lam®ita Popa para volver a ofrecerle las ayudas económicas, sanitarias y de vivienda que ya rechazó el pasado 1 de enero, cuando dio a luz en el hospital Materno Infantil de Zaragoza a su hijo Aronas, el primer niño nacido en Aragón en 2004.

Mientras la DGA busca a Lam®ita, EL PERIODICO DE ARAGON la volvió a localizar ayer practicando la mendicidad en las calles de la capital aragonesa. La mendiga, que llevaba a su hijo en brazos, ha vuelto a pedir limosna tan pronto como ha salido del centro sanitario. Lam®ita, de 36 años y madre de seis criaturas, de las que cuatro están con su compañero en Rumanía, recorrió la Gran Vía y las calles de su entorno. Entraba en bares y comercios y, sin decir palabra, extendía su mano para que le dieran dinero.

"La he reconocido enseguida", comentó una clienta del bar Dallas, en la calle de Dato. "En cuanto la he visto, me he dado cuenta de que es la misma que la que sale hoy fotografiada en la primera página de El Periódico ".

"La DGA actúa en este caso de oficio y únicamente con el fin de brindar ayuda a la madre", señaló ayer un portavoz del Departamento de Servicios Sociales. Si es localizada, Lam®ita será interrogada por un nuevo equipo de profesionales que se dedica a la problemática que plantean los inmigrantes transeúntes que practican la mendicidad.

"Es muy complicado dar una solución definitiva al problema de Lam®ita y su hijo, como al de cualquier otro mendigo, pues son personas que suelen cambiar a menudo de lugar de residencia", indicó la misma fuente del Gobierno autonómico.

"Además --agregó--, el caso de Lam®ita se agrava porque ella y uno de sus parientes han rechazado de plano todas las ayudas ofrecidas por las administraciones y distintas entidades benéficas".

Lami®ta y las personas que estaban con ella cuando dio a luz manifestaron entonces que tenían una vivienda y medios económicos suficientes para atender debidamente al recién nacido por lo que insistieron en que no querían ayudas.

Sin embargo, se ha podido comprobar que la mujer carece de domicilio fijo y que duerme por las calles en lugares diferentes.

Los problemas planteados por los menores inmigrantes sin domicilio fijo, y en particular los de nacionalidad rumana, han llevado al Gobierno de Aragón a crear un equipo de profesionales dedicado en exclusiva a la prevención de situaciones de riesgo. La nueva unidad, que se inscribe en el Servicio de Menores del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS), empezó a trabajar la semana pasada.

"El nuevo servicio tiene como misión hacer frente a los retos que plantean los transeúntes menores de edad que viven de la mendicidad", explicó ayer Miguel Ariño, responsable del IASS, quien aseguró que en cuanto sea localizada, ofrecerán a Lam®ita "todos los recursos materiales y humanos que disponen las instituciones aragonesas".

"NO ES UN CASO AISLADO" Por otro lado, Carmen Gallego, concejal de Acción Social del Ayuntamiento de Zaragoza, manifestó ayer que el Gobierno de Aragón "debería evitar que se utilicen menores para mendigar".

Para Gallego, que reconoció que se trata de un problema "muy complicado", lo sucedido con Lam®ita "no es un caso aislado". "Es --afirmó-- un ejemplo dramático y extremo, pero hay muchas mujeres que se encuentran en su misma situación".