Endesa descarta mantener abierta la central de Andorra con 1.500 horas al año o poner en marcha una instalación de biomasa o termosolar, con lo que el cierre de la térmica no tiene "vuelta atrás" y se producirá el 30 de junio de 2020, ha asegurado la consejera de Economía de Aragón, Marta Gastón.

Tras reunirse con el director general de Endesa en Aragón, Ignacio Montaner, y otros representantes de la empresa procedentes de Madrid, la consejera ha indicado que la compañía está abierta a la colaboración en iniciativas que surjan a partir de ahora, pero descarta esas alternativas, planteadas por el Gobierno de Aragón y por las organizaciones sindicales, al considerarlas inviables sin ayudas adicionales.

En cuanto a las propuestas para la formación de trabajadores, Gastón ha indicado, en unas declaraciones facilitadas por el Gobierno, que la empresa la circunscribe a su propia actividad, es decir, al personal para el desmontaje de la central y al que pueda necesitar para la construcción y mantenimiento de plantas fotovoltaicas si consigue la concesión de 1.000 MW que pretende.

En ese sentido, Gastón ha destacado que la eléctrica le ha trasladado que en su plan de acompañamiento al cierre de la central cuenta con los empleados de las subcontratas para la formación, bien para el desmontaje de la central o para las plantas fotovoltaicas si las consiguen, salvo para tareas muy especializadas.

En todo caso, el futuro de las subcontratas vendría supeditado a nuevas subcontratas, ha apuntado la consejera, quien ha indicado que para el desmontaje la empresa calcula que necesitará para un periodo de cuatro a seis años una media de 130 trabajadores, y hasta 200 en los momentos punta.

Endesa también le ha traslado su expectativa de conseguir del Gobierno central la concesión de 1.000 MW para instalar sus plantas fotovoltaicas, pero en este punto, Gastón ha recordado que el Gobierno de Aragón ha presentado una alegación al anteproyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética para que esa concesión no se conceda directamente a Endesa y quede abierta a cualquier interesado en levantar esas plantas.

Una postura que el Gobierno de Aragón, ha avanzado Gastón, volverá a trasladar la próxima semana al Ministerio.

"Cualquier promotor debería, en condiciones de igualdad de oportunidades y de competencia, poder acceder a los 1.000 MW que ahora mismo sabemos que quedarán disponibles a partir del 30 de junio de 2020", ha insistido.

Lo que sí ha compartido con Endesa, en referencia a la importación de energía de productores y generadores desde Marruecos mucho más contaminante que la que producen las centrales como la de Andorra, es la necesidad de que la UE marque los requisitos para la compra de energía en el exterior y haya una armonización con lo que se pide en Europa, ya que hay productores que están pensando en deslocalizar sus plantas para irse a estos países en los que hay "mucha mayor relajación".