Unidos por el recuerdo y el dolor, más de un centenar de personas se congregó el miércoles en la plaza de las Canteras, en el zaragozano barrio de Torrero, para denunciar la muerte de una vecina, Elvira, que presuntamente se quitó la vida este fin de semana debido a la desesperación social. «La exclusión tiene la culpa de todo esto. Ella no tenía trabajo, no tenía ingresos y debía el alquiler de su piso. El mismo viernes estuve con ella y le noté feliz, pero mira», contaba emocionado Pedro L. pareja de la fallecida.

Según explicó, Elvira había tenido problemas para pagar a su casero e incluso hubo un intento de desahucio que no pudo ejecutarse porque la mujer tenía perros, por que tenía que intervenir el centro municipal de protección animal. «Pero ya estaba solucionado. Yo mismo hablé con el casero y fue muy comprensible. Me iba a encargar yo de todo, pero ya es tarde», dijo Pedro.

Según su relato, Elvira contaba con muchos conocidos en el barrio que le ayudaban comprándole comida y asistiéndole con lo que necesitara. «Tenía muchos amigos, pero creo que en un punto vio que no era independiente, que sin los demás no podía mantenerse y eso le llevó a quitarse la vida. Yo no lo entiendo. Era una mujer maravillosa. Esta es la consecuencia de la exclusión social que sufría», insistía.

La concentración fue convocada por las asociaciones vecinales de Torrero-Venecia, La Paz y el Cantero de Torrero y en ella estuvieron presentes miembros de Stop Desahucios y de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca. Juntos reclamaron a la Administración que ponga en marcha medidas para evitar que se lleguen a dar este tipo de situaciones y para que se acelere la tramitación del Ingreso Mínimo Vital. Además de Elvira, otro vecino de Torrero se quitó la vida recientemente por circunstancias similares. Una muestra de que mientras los políticos debaten, aprueban y rechazan, la gente sigue pasando penurias.