Luis Fernando Marín dejará de ser el alcalde de Escucha el próximo 17 de diciembre cuando se celebre la moción de censura presentada el pasado martes por su propio grupo, Ciudadanos, y Chunta Aragonesista en el ayuntamiento de la localidad de las Cuencas Mineras.

El todavía primer edil fue expulsado de su grupo municipal después de que sus tres compañeros de formación y concejales de Ciudadanos denunciaran que no se contaba con ellos para tomar importantes decisiones. Uno de ellos, Héctor García, ha sido propuesto como candidato.

La expulsión de Marín viene motivada a raíz de que el resto de concejales tuviera conocimiento de diferentes hechos «que conculcan la normativa interna y atentan contra los valores que la formación liberal defiende en todas las instituciones», indicó el partido político.

En su comunicado la formación también envió un mensaje de tranquilidad a los vecinos de Escucha y manifestó que «Ciudadanos antepondrá en todo momento el interés general del municipio y velará por la buena gestión del consistorio».

CHA apoya la moción de censura, pero considera que Ciudadanos no ha hecho lo que debía. «Creo que hay una falta de responsabilidad de Ciudadanos desde hace mucho tiempo», dice el concejal y exalcalde Javier Carbó.

También señala que ya denunciaron ante la Inspección de Trabajo irregularidades en ciertas obras, que se realizaban sin ningún control ni dirección, ni siquiera con los proyectos aprobados. Y apunta hacia la contratación de personal y de servicios. «Un caos total», describe.

Asimismo, denuncia que la pésima situación comenzó hace tiempo, sumada al «mal ambiente» y situaciones que «rozan la ilegalidad».

El Ayuntamiento aún trabaja con los presupuestos prorrogados del 2019, por lo que CHA defiende que con el nuevo alcalde debe darse un cambio de rumbo, con una línea de trabajo abierta. «Una vez que analicemos la situación, lo primero será tener un presupuesto y empezar a trabajar», explica.

Marín encabezó la lista electoral de Ciudadanos en Escucha y con cuatro concejales arrebató la alcaldía a CHA (con tres representantes locales).

Ya fue alcalde con el PSOE desde 1987 hasta 2007. Fue condenado a dos años de prisión como autor de un delito de revelación de secretos por difundir en la campaña de las municipales del 2003 datos íntimos del alcaldable de CHA a los que había tenido acceso por haberlo tratado como paciente.

Hace un año, ya en la alcaldía con Ciudadanos, fue investigado por un presunto delito de abuso sexual.