Una chimenea ha sido el posible origen del incendio que esta madrugada ha arrasado cinco apartamentos de la última planta del edificio A de Residencial Formigal, en la estación invernal del Pirineo oscense.

El incendio no ha causado daños personales a los inquilinos que en ese momento ocupaban los apartamentos del edificio, todos segundas residencias, ha informado a Efe el alcalde de Sallent de Gállego, Jesús Gericó.

Tampoco ha afectado a la estructura del edificio, pero ha acabado con la cubierta del inmueble, de cuatro plantas, ya que los pisos que han ardido eran los áticos.

Gericó cree que la parte afectada se podrá reconstruir, si bien, es necesario esperar al informe de la policía judicial, por lo que, de momento, el edificio ha sido precintado ya que, además, ha entrado agua por los conductos eléctricos a los pisos inferiores y no se pueden habitar.

No obstante, los inquilinos podrán acceder a las viviendas para recoger sus pertenencias acompañados por los bomberos, aunque los de los áticos "se han quedado con lo puesto", ha reconocido el alcalde de Sallent, quien ha informado que esta mañana ha ardido otra chimenea en su localidad.

En los trabajos de extinción del incendio han participado unos quince efectivos de los bomberos de la Comarca del Alto Gállego, cuya labor ha destacado Gericó, ya que han impedido que el fuego se propagase al inmueble colindante.

Además ha incidido en lo duro de los trabajos debido a las bajas temperaturas, -5 grados, y al fuerte viento que soplaba.