El Juzgado de lo Contencioso Administrativo de Huesca ha emitido un auto en el que acuerda limitar las medidas cautelares planteadas contra el proyecto de una planta incineradora en Monzón hasta la finalización del proceso de revisión de la autorización ambiental dada a los promotores.

Según informa la empresa promotora, Solmasol, la decisión judicial limita el alcance de las referidas medidas demandadas por los conservacionistas para, entre otras cuestiones, dejar sin efecto la no admisión a trámite del recurso interpuesto contra la autorización dada al proyecto.

En su auto, el juzgado oscense estima las medidas cautelares solicitadas contra la autorización dada por el Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (Inaga), «en tanto concluya el procedimiento de revisión de oficio de la misma por parte del mismo organismo». Añade el juez que el resultado final obtenido «podrá merecer la reconsideración de esta medida cautelar».

El Inaga ya dictó el pasado 1 de febrero, en el marco del proceso de revisión, una nueva autorización ambiental integrada que cuenta con el informe favorable de la Dirección General de Salud Pública del Gobierno aragonés y que incluye medidas adicionales de control de las emisiones.

Los ecologistas critican la instalación de la incineradora en un terreno rústico a 600 metros del casco urbano y reiteran que se ubique en el polígono.