Las mejoras introducidas en la planta de Torraspapel (más conocida como La Montañanesa) empezarán a hacerse efectivas a partir de este mismo mes. Después de una inversión global de 23 millones de euros, se va a proceder a la conexión de los electrofiltros a las calderas que expulsan humos al cielo zaragozano para que a partir del día 27 se empiece a notar la reducción de la contaminación y de los malos olores que emiten cada día. Un mal que llevan sufriendo los vecinos de la ciudad, sobre todo los de los barrios más próximos, y que se prevé reducir en más de un 90% gracias a estos trabajos.

La conexión es el momento cumbre de una obra de ingeniería que ha supuesto el desembolso de unos 7,5 millones de euros para la empresa, que tiene previsto realizar "una parada técnica desde el día 18 hasta el 26" de este mes para hacer los trabajos de conexión con las calderas en condiciones.

Estos electrofiltros se encuentran en "una especie de edificio lateral que está pegado a las calderas", construido por una empresa portuguesa, en el que "en el interior todos los vapores pasarán por unos circuitos cerrados" en los que se van depositando las cenizas y otros residuos que ya dejarán de expulsarse a la atmósfera. Menos contaminación también.

EL TUBO DE ESCAPE Así lo explicaron fuentes del comité de empresa consultadas por este diario, quienes explicaron esta obra tan importante "como cambiarle el tubo de escape al coche, para que salgan menos humos y menos cenizas por las chimeneas". "Este era un compromiso medioambiental que tenía la empresa para cumplir con la legislación vigente y ahora llega el momento de empezar a ver los resultados. Los informes técnicos apunta a ese más de un 90% y el efecto podría darse en poco tiempo.

Para realizar la parada técnica, "la empresa que está construyendo todo debería acabar los trabajos esta semana". Entonces, la planta zaragozana de Torraspapel parará su producción durante nueve días (como mínimo, si no surgen complicaciones en la conexión a las calderas), momento que también se ha aprovechado desde la firma para dar vacaciones a algunos de sus empleados que durante esos días no tendrán que atender a la fabricación. Sí estarán allí los centenares de trabajadores de mantenimiento que se van a dedicar a agilizar al máximo la conexión para reestablecer la producción cuanto antes.