El Mercado Central de Zaragoza reabrirá sus puertas el próximo 6 de febrero. Ni el 28 de noviembre como se anunció en su día pero que no dio tiempo a cumplir, ni el 30 de enero, como pedían los detallistas al calor de la festividad de San Valero. Será una semana después, precisamente para no hacerlo coincidir con ella y preparar con más tiempo una inauguración oficial que, no hay que olvidar, es mejor no hacerla coincidir con el pleno de la aprobación del presupuesto del 2020. Un estreno que llegará con 66 de los 74 puestos de detallistas abiertos y los cuatro de restauración. O lo que es lo mismo, con ocho del total de 78 con la persiana bajada tras año y medio de obras en este edificio centenario.

La responsable de Economía, Innovación y Empleo del Ayuntamiento de Zaragoza, Carmen Herrarte, y la Asociación de Detallistas del Mercado Central concluyeron que esta era la mejor opción. Un anuncio que hicieron de forma conjunta y que conllevará, explicaron, que el actual mercado provisional de la calle Salduba cierre sus puertas «el 3 de febrero». Los comerciantes tendrán, así, 72 horas para efectuar el traslado hacia el remodelado edificio que abandonaron el 1 de abril del 2018. Retornarán por fin muchos menos de los que eran entonces y con la incertidumbre de si algún día se llenará. De momento su regreso se producirá 22 meses después y tras tres intentos fallidos por adjudicar los 74 mostradores de venta de alimentos.

EL 20 DE ENERO

El presidente de la Asociación de Detallistas del Mercado Central, José Carlos Gran, acudió a la cita con el consistorio acompañado por la tesorera, Carmen Cámara, y el gerente, José María Bayod. Y si hace solo unas semanas manifestaba que sería un «fracaso» abrir más tarde del 31 de enero, ayer aceptaba esta nueva promesa de apertura: «es una buena fecha, es verdad que dijimos que ojalá fuera en enero, pero retrasarlo una semana está justificado totalmente, teníamos San Valero por delante y entendemos que esta ciudad se merece el respeto para ese día 29 y no anule el protagonismo para ninguna parte». declaraba ante la concejala.

Las pruebas de frío va a comenzar ya y lo cierto es que, según ha podido saber este diario, el «20 de enero» debería estar entregadas todas las obras que ahora se están acometiendo. Los detallistas ya han encargado todos los trabajos y, al parecer, ya ha empezado el montaje de muchos de ellos, con la empresa que se encargará de proporcionar todo el mobiliario hecho a su medida. Pero solo uno está completamente terminado.

Mientras tanto, los puestos de restauración, cuatro mostradores que, según explicaron en noviembre, fueron los que provocaron con su retraso en las obras que estuviera todo a punto para inaugurar el 28 de noviembre, ya están en construcción y su previsión es la de finalizar su instalación para el 15 de enero. Cinco días más necesitarán el resto de detallistas para tener sus espacios a punto para acometer el traslado. Todos ellos, además, ya tienen el visto bueno del Departamento de Sanidad de la DGA a sus proyectos, con lo que nada debería impedir ese estreno en el mes de febrero.

¿Cómo será la inauguración? A esta pregunta, la concejala no supo aclarar en que tipo de estreno está pensando ya que se acaba de decidir la apertura al público y no ha dado tiempo. Aunque sí aseguró que su intención es «plantear algún otro tipo de celebración».

Tampoco Herrarte tiene decidido cuándo lanzar el cuarto intento para atraer nuevos detallistas. Ayer, tras la reunión con los detallistas, solo dijo que «hay operadores interesados ya» y que no creía que «se tarde mucho». Pero la propia asociación le había urgido hacerlo por estas fechas, con el edificio ya remodelado y antes de un estreno que quizá sirviera de acicate para los posibles interesados en uno de los ocho puestos aún vacantes. «Tres pescaderías, dos verdulerías, una carnicería y dos pollerías», recordó el presidente de la asociación de detallistas. Eso significaría que el espacio que estos le habían solicitado al consistorio para usos compartidos no parece estar ya disponible y solo se les cederá uno, para desarrollar en él un servicio de consigna y organizar todo lo relacionado con el reparto a domicilio de pedidos.

Tampoco aclaró Herrarte los plazos que maneja el ayuntamiento para el desmontaje del actual mercado provisional y reapertura al tráfico de la calle Salduba, que lleva año y medio cortada por esta carpa. Ni cuándo podría llevarse a Parque Venecia, que de momento solo es su «objetivo», llevarlo allí para que funcione como un «equipamiento comercial con un mercado». «Es una propuesta que hemos hecho, estamos trabajando en la viabilidad y necesitará el apoyo de otros partidos para sacarlo adelante porque somos un Gobierno en minoría», aclaró.