El ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, confirmó ayer que el Ejecutivo central está dispuesto a "iniciar el diálogo en cuanto a nuevas exigencias" desde Aragón "para mejorar el servicio que se presta a los ciudadanos". El ministro, en su primera visita a la comunidad, insistió en que "no se trata tanto de si esto es tuyo o mío, sino cómo lo mejoramos", a lo que añadió que "la nueva era en la que entramos no se caracteriza por darnos codazos por las competencias, sino cómo mejoramos la prestación de servicios".