La operación asfalto llega a su fin este año en una de las vías más transitadas de Zaragoza: el paseo de la Constitución. Con el asfaltado que dejará un solo carril de circulación entre la calle Bruil y la plaza Paraíso, una intervención que obligará a desplazar unos metros las paradas de autobús que se verán afectadas. Pero al margen de las afecciones, vuelve a confirmarse que la inversión municipal, 215.831 euros este año, similar a la de los últimos tres ejercicios, sigue dejando quejas en los colectivos vecinales, en los que ya se han trasladado varias quejas, por los viales sin atender o porque los que se han reparado no eran los prioritarios para ellos.

Desde el área de Infraestructuras les explican que eran, técnicamente, las que más urgían, pero a pie de calle se ve de otra manera y lamentan que no se haya consultado a los barrios cuáles consideran que deberían incluirse en un listado que, no en vano, se inició con 15 viales y ha acabado con más de una veintena.

Malestar como el que ha trasladado Chunta desde San José, donde asegura que calles como las de Puente Virrey, Camino del Junco, García Lorca, Camino Cabaldós y un tramo de Miguel Servet no se han incluido cuando "su estado es penoso y necesitan de manera urgente ser asfaltadas". O en Torrero, donde se pedía hace unos días lo mismo para Fray Julián Garcés, entre las calles Esperanza y Castillo de Loarre, "muy deteriorado por el aumento del tráfico generado por el centro comercial Puerto Venecia".

En el Actur, por otra parte, tampoco se entiende por qué se asfalta la calle Alberto Duce "sin avisar", cuando hay "otras que lo necesitan muchísimo más", afirmó Guillermo Corral, vocal de Chunta.

Mientras, el paseo Constitución es evidente que necesitaba la intervención que se inicia hoy, aunque se vaya a notar en el tráfico ya que quedará solo uno de los tres carriles abierto. Mientras la parada donde se detienen hasta cinco líneas de bus (25, 30, 32, 51 y N6) se desplazará unos metros.