Los votos del PP y el PAR impidieron ayer en las Cortes de Aragón que prosperara una proposición de ley para impedir que en Aragón se aplique la fractura hidráulica o fracking. Esta técnica de extracción de gases del subsuelo está muy cuestionada por diversos informes al emplear muchos millones de litros de agua y elementos que podrían afectar al medio ambiente y a las personas. Actualmente hay varias solicitudes para operar en Aragón.

La proposición de ley fue presentada por IU y defendida por su diputado Luis Ángel Romero. Hace unos meses, todos los grupos de las Cortes, incluidos PP y PAR, apoyaron una iniciativa de CHA para declarar a Aragón "territorio libre de fracking". Sin embargo, ayer consideraron que no era oportuna esta proposición de ley, aludiendo a que las competencias corresponden a la Administración central y a que hay que tener prudencia puesto que no hay todavía una posición clara acerca de las contraindicaciones de esta práctica. PSOE y CHA apoyaron esta propuesta de IU. Ayer, el Parlamento vasco aprobó una iniciativa similar para legislar contra esta materia.

Romero criticó la falta de información sobre algunas solicitudes efectuadas en Aragón, que afectarían a 54.000 hectáreas en "el corazón" del Maestrazgo, y denunció la "elevada" ocupación del territorio que comporta el uso de esta "agresiva" y "perjudicial" técnica. El "problema", indicó Romero, es que el agua utilizada, contaminada con los aditivos, no se recupera en su totalidad "y provoca la contaminación de los acuíferos", e hizo notar que los aditivos que se emplean son "cancerígenos y mutagénicos", entre otros bencenos, xilenos y sulfuros.

Aunque IU encontró el apoyo del PSOE y CHA a través de Alfonso Vicente y Joaquín Palacín, respectivamente, el diputado del PP, Eduardo Peris, y el del PAR, Joaquín Peribáñez, consideraron que la proposición de ley llega antes de tiempo y genera dudas. De hecho, el informe jurídico del Gobierno de Aragón también las planteaba.