El presidente de Aragón, Javier Lambán, indicó ayer que quizá sea el momento de abordar la supresión de los aforamientos en la comunidad y se mostró convencido de que la inciativa saldría adelante si todos los grupos de las Cortes son consecuentes con sus declaraciones previas.

En declaraciones a los medios, el jefe del Ejecutivo autonómico admitió que los aforamientos, que existen desde el arranque de la democracia, se perciben desde hace algún tiempo como una fórmula «desfasada», y esa visión, dijo, la comparten todos los partidos políticos.

Y dado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha abierto el debate, quizá sea el momento de afrontarlo en Aragón, si bien recordó que es algo que no puede abordar su ejecutivo, ni siquiera el PSOE, que cuenta con 18 diputados de los 67 en las Cortes, sino que lo debe afrontar el conjunto de los grupos parlamentarios porque requiere la modificación del Estatuto de Autonomía.

«Son palabras mayores, y por tanto creo que el Gobierno en modo alguno debería suplantar a las Cortes de Aragón en la adopción de esta iniciativa», añadió el presidente, quien apuntó que si la Cortes le encomiendan al Gobierno que haga una propuesta de reforma del Estatuto, este estará «encantado de hacerlo».