Un total de 80 profesores jubilados se han inscrito en la Red de la Experiencia, de los cuales, varios de los participantes son el grupo de teatro escolar del instituto Avempace, de Zaragoza.

Se trata de una iniciativa con la que estos docentes volverán a las aulas este curso para compartir, tanto con otros profesores como con los propios alumnos, todos sus conocimientos y su metodología.

Esta iniciativa se aprobó el pasado 17 de julio para regularizar una práctica que se llevaba a cabo en numerosos centros educativos de la capital aragonesa.

Los participantes llevarán a cabo charlas de astronomía, educación emocional, atención psicológica a refugiados, visitas explicativas en el Casco Histórico de Zaragoza, evolución del papel de la mujer a lo largo de la historia, cuentacuentos, blogs y redes sociales, cómo llevar un huerto escolar y una granja de gallinas, proyectos europeos o matemáticas recreativas y juegos inteligentes.

Con la Red de la Experiencia, los voluntarios podrán optar a impartir estas charlas para ayudar al profesorado y colaborar en actividades extraescolares con los propios alumnos del centro que elijan, bajo la responsabilidad de los tutores correspondientes.

De esta forma, se garantizará el correcto desarrollo de sus tareas, dado que hay muchos docentes que, aun habiendo concluido su vida laboral, «siguen participando en las escuelas con charlas, actividades extraescolares o conduciendo foros literarios o científicos», afirmaron estas fuentes.

siguientes pasos / Tras presentar la solicitud, los 80 docentes apuntados a esta iniciativa, deben rellenar un formulario, en la dirección de Formación del Profesorado, donde especifiquen el nombre y el título de las actividades formativas para que los centros educativos públicos puedan planificar las actividades y decidan qué tipo de perfil les interesa.

Es una forma de que estos profesionales, de forma voluntaria y sin remuneración económica, puedan aportar su experiencia al sistema educativo. Se trata de una serie de iniciativas que ya se ponían en práctica durante años anteriores pero finalmente llega a la normativa de la Administración aragonesa.

Además, los profesores que ya se han jubilado podrán crear asociaciones con fines educativos para promover actividades de carácter cultural, lúdico y formativo. Podrán formar parte del punto de encuentro entre el profesorado jubilado, los centros educativos y las familias, una labor que ya desarrollan otras entidades sociales. Con el curso ya empezado, falta por saber si estas medidas surtirán efecto en el alumnado y el profesorado de los centros educativos.