Les hablaba ayer de los divergentes de Veronica Roth, pero si los hay en la política española están en Podemos. Un partido, un movimiento o fénomeno social que en la última encuesta del GESOP acaba de dar la gran campanada y un susto de campeonato a los partidos convencionales que ellos llaman la casta.

De celebrarse mañana mismo unas elecciones generales en España, el recién nacido partido del joven Pablo Iglesias pasaría a convertirse en la tercera fuerza del país, con cerca de 60 diputados y a sólo 30 de los escasos 90 que obtendría un PSOE en sus horas bajas desde los albores de la Transición.

Según el citado estudio estadístico, Iglesias se haría con una cuarta parte de los votantes socialistas, y con un porcentaje aún mayor de los votantes de Izquierda Unida, cuyo ascenso frenaría en seco, sacándole a Cayo Lara más de 30 diputados de ventaja.

Podemos arañaría, además, un 10 % a la UPD de Rosa Díez y un 12% a la abstención prevista.

La lógica no preveía nada de esto, pero, a la luz del éxito electoral europeo de Podemos, lógicamente estamos hablando de una fuerza transversal, con amplia base social, que recibe apoyo de todas las edades, indistintamente de su comunidad, situación laboral o sexo. Estamos hablando de un arma política y de un partido que pueden resultar decisivos.

Mientras Podemos y sus líderes comienzan a diseñar estrategias internas y externas, la revista Tiempo ha buceado en las declaraciones de su principal dirigente en busca de afinidades ideológicas o principios teóricos que puedan adelantar por dónde van a ir los tiros parlamentarios de Podemos, si es o será partido con vocación de gestión gubernamental, si...

Pero veamos algunas de esas frases pronunciadas por Pablo Iglesias. "Hemos nacido para echar al gobierno de la casta y acabar con la corrupción". "Un socialista no debería acabar en el consejo de administración de una eléctrica". "Una huelga no es una manera de medir un Estado de Derecho. Es una guerra. Y a una guerra nos gusta ir con nuestras mejores armas". "La revolución cubana lo marcó todo, el inicio y la recuperación de la lucha armada como estrategia política de acceso al poder..." "Mi ego está volando a la altura de Carrero Blanco".

¿Reformismo, revolución? Habrá que ver la evolución de Podemos.