El Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón ha comunicado al Tribunal Supremo su intención de interponer un recurso de casación a la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) que anula el Plan de Ordenación de Recursos Humanos del Servicio Aragonés de Salud.

El departamento anunció ayer esta medida y añadió que el plazo para pronunciarse estaba a punto de concluir. Así, a partir de ahora, Sanidad dispondrá de tres meses para la formalización del recurso, de modo que no se pierde la opción de poder recurrir la sentencia, si así se decide.

La sentencia declara nulo el acuerdo del Gobierno de Aragón de 30 de abril del 2013 por el que se aprobaba el plan, que regula la prolongación de la permanencia en servicio activo al cumplir la edad ordinaria de jubilación forzosa, además de una resolución y una orden posterior para establecer y dar publicidad al procedimiento.

Ese plan, ejecutado por el anterior Ejecutivo, fue llevado a los tribunales por un amplio número de facultativos, a los que se obligó a retirarse de la vida profesional una vez alcanzada la edad de jubilación a pesar de que su deseo era continuar en activo.

El sindicato médico Cemsatse se pronunció en contra del plan, al considerar que se trataba de un hacer un "ERE de médicos y enfermeras, con el único y exclusivo fin de ahorrar en los próximos dos ejercicios presupuestarios", por lo que respaldó a los médicos que acudieron a los tribunales.

Otros, como CCOO, aprobaron la medida pero no la forma de llevarla a cabo. "El fondo de la sentencia no va contra la jubilación a los 65 sino por el procedimiento utilizado. Creemos que los médicos y todas las personas deben jubilarse a los 65, pero el modo utilizado para hacerlo fue una chapuza. Se debió haber estudiado cada caso y no derrochar mala educación", indicó ayer Juan Urdániz, de CCOO.

Sanidad anunció, en este sentido, que a lo largo de este mes van a iniciarse las conversaciones con los sindicatos para empezar a negociar un nuevo plan de recursos humanos.