La tarjeta que una pareja de recién casados de la localidad francesa de Saint Jean de Beugné, en la región de Países del Loira, escribió y ató a un par de globos de helio el pasado 1 de julio fue encontrada un día después en la localidad turolense de Bello.

Después de atravesar los Pirineos y más de 850 kilómetros, el mensaje que esta pareja de recién casados, Maéva y William, ató a un par de globos solicitando que quien lo recibiera se pusiera en contacto con ellos para alargar la dicha de ese día y del matrimonio, llegó a una finca de Bello cuyo propietario iba a cosechar la mañana después del enlace.

Fue el marido de María Nieves Calle, una vecina de esta localidad turolense de 250 habitantes censados, quien encontró los dos globos deshinchados enganchados a su remolque y una tarjeta atada con un mensaje en francés, según ha explicado ella en declaraciones a Efe.

El texto recoge que para la pareja gala fue "una boda hermosa" y para el globo "un gran viaje" y solicita al receptor del mensaje que, para prolongar ese día importante, les remita una pequeña respuesta.

Una contestación que Calle no dudó en realizar después de descartar que se tratara de una broma, como reconoce que pensó inicialmente, y después de buscar en las redes sociales a la pareja, pese a que en la tarjeta se incluía la dirección postal del matrimonio Pillaud en Saint Jean de Beugné.

Calle ha explicado que envió un mensaje de Facebook que todavía no ha tenido respuesta, aunque confía en tenerla, y cree que es William el destinatario correcto de su mensaje dado que en la fotografía de su perfil aparece junto a una mujer el día de su boda, el 1 de julio.

A la protagonista española de esta historia le gustaría que pudiera dar pie a un futuro hermanamiento entre Bello y Saint Jean de Beugné, aunque todavía no ha tenido oportunidad de comentar esta propuesta con el alcalde.

En cualquier caso, asegura que ha sido una anécdota "bonita, divertida y romántica", que ha puesto un poco de alegría en un pueblo como otros muchos marcado por la despoblación y el cierre del colegio mientras espera la respuesta de esta pareja de recién casados cuya historia de amor ha traspasado los Pirineos y roto la rutina de este pequeño pueblo de Teruel.