Un inmigrante africano, Emmanuel A., de 34 años, falleció ayer carbonizado en un incendio que se originó mientras trabajaba en la fábrica de Proma Hispania, ubicada en el polígono industrial de Epila. En el accidente laboral también resultó herido otro joven de origen valenciano, V. M. M. Los dos hombres trabajaban en dicha empresa, aunque en una situación de "subcontratación en cadena", según explicaron fuentes del sindicato CCOO-Aragón.
Sobre la una menos diez de la tarde, los bomberos de La Almunia de Doña Godina recibían la llamada de un trabajador de Proma Hispania avisando de un incendio en la nave. Minutos antes, el inmigrante fallecido y su compañero, de 23 años, estaban subidos en una grúa sobre la cabina de pintura y trabajaban con un grupo de soldadura en un conducto de ventilación. Fue al parecer una chispa que entró en contacto con la pintura lo que originó una enorme deflagración y el incendio.
ATRAPADO ENTRE LAS LLAMAS Nada más producirse la explosión, los dos trabajadores intentaron saltar de la cesta de la grúa aunque, según explicó el secretario regional de la Federación del Metal de UGT, Luis Tejedor, el operario fallecido no consiguió escapar de las llamas al estar atado a un arnés. Su compañero, el joven valenciano, sí lo consiguió y sufrió heridas en su pierna derecha al caer al suelo. V. M. M fue trasladado en una ambulancia de la comarca, en la que viajó acompañado por la médico de la empresa, hasta la clínica de la MAZ en Zaragoza.
Durante unas tres horas, los más de 150 operarios que se encontraban en la fábrica --que tiene cerca de 300 trabajadores-- dejaron sus puestos de trabajo y salieron al exterior de la nave. Hacia las tres y media, el coche con el féretro abandonaba las instalaciones, después de que la juez levantar el cadáver, y los empleados volvían a la actividad habitual.
El accidente laboral ocurrido ayer en Epila guarda muchas similitudes con el que se produjo hace dos meses en Calatayud, en el que un inmigrante senegalés, Demba Sow, también subcontratado, resultó herido de gravedad.
El el caso de Epila, y según fuentes de CCOO-Aragón, Proma Hispania había subcontratado a la empresa Balmon para realizar unos trabajos de mantenimiento de la nave y ésta, a su vez, había hecho lo propio con la empresa M+Wzanter, para la que sí trabajaban las víctimas.
Por ello, tanto UGT como CCOO volvían a denunciar ayer que la mayor parte de los accidentes laborales están vinculados a condiciones de trabajo "altamente precarias".
