El sindicato agrario UAGA espera este 2020 una de las mejores cosechas de cereal de invierno, un 25 % superior a la de 2019 y entre un 15 y 20 % más que la media de los últimos años, hasta las 2.611.750 toneladas frente a la media de 2,2 millones.

Se trataría de una cosecha superior incluso a la histórica de 2003 pero de peor calidad, como ha explicado en una rueda de prensa telemática Inés Artero, técnica de UAGA.

Así, del total de kilogramos esperados, 1.685.500 toneladas serían de cebada, 540.000 de trigo blando y 210.000 de trigo duro, 62.500 toneladas de avena, 41.500 de centeno y 71.000 de otros cereales.

Aunque el regadío representa el 40 % de la superficie, las oscilaciones con respecto al de secano, según Artero, son "pequeñas" y este año se espera además una producción más pequeña por las condiciones climáticas adversas, con altas temperaturas en mayo y lluvias torrenciales y granizo en junio, que han hecho proliferar los hongos y las malas hierbas.

Es por lo que el responsable del sector de cereales de UAGA, Ferdinand Cookson, ha incidido en la necesidad de invertir en un incremento de la superficie regable y en una "verdadera gestión hídrica" adecuada al territorio, que asegure la rentabilidad de las explotaciones y el asentamiento de la población, pero no solo en la margen izquierda del Ebro.

El motivo, además de que los agricultores puedan vivir en sus pueblos, es que las demandas de consumo mundial de cereal son "cada vez mayores y los estocajes cada vez más justos" y en España la disponibilidad de terreno "es la que es", ha señalado Cookson.

Respecto a los precios, desde UAGA han denunciado que los operadores "están aprovechando la falta de almacenaje de muchos agricultores y pagando unos precios vergonzosos" que, según el secretario de UAGA Zaragoza, Toño Romé, son, en el caso de los cereales de pienso, "los mismos que hace 35 años pero con unos costes del siglo XXI".

El problema, lamenta, es que los agricultores necesitan vender la cosecha "ahora" para disponer de liquidez y también porque no está en almacenes y es por lo que desde el sindicato agrario reclaman "volver al almacenaje público" pero también por apostar por la investigación, la mejora de la calidad y de la resistencia a las enfermedades y de la producción.

Romé denuncia asimismo que en un momento en el que los agricultores se ven "obligados" a vender, la Lonja del Ebro, que "no marca precios pero sí la tendencia, salga con una cotización tan a la baja que nos está haciendo perder dinero".

No obstante, UAGA reconoce que aun siendo un buen año de producción de cereales en toda España, "el precio final lo marcará el mercado internacional, puesto que será necesaria la importación de unos 8 millones de toneladas de cereales para cubrir las necesidades de consumo".