Desde su fundación en el año 1882 y a través de sus tres épocas de actividad, la Academia General Militar de Zaragoza (AGM) ha formado a más de 23.000 oficiales del Ejército de Tierra, Guardia Civil y Cuerpos Comunes de las Fuerzas Armadas. Uno de sus más insignes el actual Rey Felipe. Con motivo del 90 aniversario de su reapertura, esta institución quiso ayer celebrarlo con la ciudadanía en una jornada de puertas abiertas que congregó a más de 11.000 zaragozanos.

A primera hora de la mañana ya había gente en su interior que, como María Luisa, regresaba «muchos años después» de que su hermano jurara bandera. «Me hace ilusión volver a este sitio, hace el mismo calor que entonces», recordaba con una sonrisa. Otros como José Luis y Patricia habían decidido llevar a sus hijos Luis y Carmen, de 10 y 7 años, para que disfrutaran de la oferta anunciada.

Y es que, por un día, el cartel de entrada a estas instalaciones en el que se lee prohibido el paso dejaba de tener sentido, ya que detrás de esos muros había exhibiciones ecuestres, saltos en paracaídas y actividades militares adaptadas a los más pequeños para que conocieran cómo es el entrenamiento de un militar, casualmente, coincidiendo con el Día de las Fuerzas Armadas. También hubo un partido de fútbol entre los veteranos del Real Zaragoza y los estudiantes de la AGM. Actividades que obtuvieron una gran respuesta, si bien conforme avanzaba la jornada y las temperaturas asecendían los visitantes optaban por el tour histórico, el museo o la sala de banderas. Muy poca gente conoce que en dichas salas se guarda el mantón que la Virgen del Pilar lució en la Guerra de la Independencia o la bandera que mandó tejer la reina María Cristina de Hagsburgo y que es la enseña más antigua que está en activo en la actualidad. Unos tesoros históricos que se unen, por ejemplo, a una colección de fusiles del siglo XVI hasta el Mausser de la guerra de Filipinas, además de armas utilizadas en la guerra civil.

Uno de los mandos que destellaba mayor alegría por la gran acogida era el director de la Academia, el general Luis Lanchares, quien reconocía estar «sorprendido», mientras quería resaltar que el plan de estudios cambió hace unos años pero los resultados están siendo buenos y que las dos primeras promociones están haciendo su trabajo «a plena satisfacción», De hecho, los visitantes pudieron recibir información sobre los estudios. La jornada finalizó con un concierto de la Unidad de Música.