El Casademont Zaragoza afronta la undécima jornada de la Basketball Champions League ante el Neptunas Klaipeda, este miércoles (20.30 horas) en el Príncipe Felipe. Tras recuperar sensaciones ante el Falco, el equipo tiene una oportunidad inmejorable de alcanza la séptima victoria, que aclararía el camino hacia los octavos de final de la competición continental. Enfrente, el adversario lituano acumula cuatro derrotas consecutivas en Europa y gastará una de sus últimas balas para meterse en la siguiente fase. Duelo por todo lo alto en el pabellón zaragozano de dos grandes aspirantes dentro del grupo. «El equipo ha dado ese salto de solidez y adaptación a la competición. Va a ser un partido muy complicado para nosotros por el tipo de rival que es. Cuenta con jugadores internacionales, saben jugar, tienen calidad y nos van a poner en problemas. Todo lo que tengamos lo vamos a echar en la cancha para llevarnos la victoria», afirmó Sergio Lamúa, el segundo entrenador del Casademont.

El conjunto zaragozano regresa a la competición europea después de mostrarse de nuevo irregular en la ACB. Dos derrotas abultadas en Liga ante el Andorra (106-78) y el Canarias (99-111) han hecho saltar las alarmas del cuerpo técnico. Al equipo le faltan sesiones de entrenamiento debido a las estrecheces del calendario. Los zaragozanos se clasificaron para la Copa tras una impecable primera vuelta, y con los objetivos cumplidos, llegó cierta relajación. Ahora, con la trascendencia del partido, se espera su mejor versión. «En nuestra trayectoria en Champions hemos jugado con muchas bajas. El equipo es diferente actualmente, tiene otras armas. Sabemos que dependemos de los partidos de casa, así que estos dos encuentros son vitales, sin renunciar a todo lo que podamos sacar fuera», aseguró Lamúa.

EL RIVAL / No lo tendrá fácil ante el Neptunas Klaipeda. En la ida, su circulación de balón con 26 asistencias y su acierto en el triple con un 46% fueron dos de las claves que decantaron el partido en el Svyturio Arena (91-73). «Nos preocupa mucho su circulación de balón. Son muy generosos en el juego, siempre buscan un pase más y a través de la ventaja son capaces de encontrar el mejor tiro para el equipo», avisó el entrenador, que no se fía del mal momento que atraviesa el conjunto lituano tras perder por 38 puntos en su competición nacional contra el Lietkabelis. «Hay que tomarlo con perspectiva porque se han enfrentado a grandes equipos. Saben que si ganan se vuelven a meter dentro y este hecho los hace más impredecibles y peligrosos».

Al calor del Príncipe Felipe, el equipo no puede fallar ante su público y no debe esperar más para dar este paso adelante en Europa. «Con dos victorias en casa sabemos que estamos dentro. Dependemos de nosotros mismos y eso nos da fuerza y confianza. Con nuestro público somos un equipo que hace un buen baloncesto. Esperemos hacer un buen partido, que salgan las cosas bien y quedarnos con la victoria», concluyó el segundo entrenador.

LA ENFERMERÍA

El Casademont Zaragoza no podrá contar con dos jugadores importantes dentro del esquema de Fisac. Vázquez, que arrastra unas molestias musculares, y San Miguel, que continúa recuperándose del golpe en la zona inguinal que sufrió en el partido ante el Falco, no podrán estar bajo las órdenes del entrenador ante el Neptunas. Ambos son componentes fundamentales de la columna vertebral del grupo, por su experiencia y ascendencia dentro del vestuario, junto a Renaldas Seibutis, que todavía no ha podido debutar esta temporada. «Los dos van en una buena evolución pero necesitamos más días para seguir trabajando con ellos y que puedan estar para sumar al equipo. Justiz está entrenando poco a poco con molestias. Esperemos que llegue a participar pero habrá que verle en el entrenamiento previo y cuáles son sus sensaciones», confirmó Lamúa.

El pívot cubano no ha encontrado su mejor estado de forma desde finales del pasado año y ha llegado con molestias a muchos partidos. Así está la enfermería del Casademont, en estos momentos algo saturada, debido a la premura del calendario y la dificultad de los rivales a los que tiene que hacer frente el conjunto zaragozano. Desde el cuerpo técnico confían en tener a todos en perfectas condiciones para hacer frente a la parte más ardua de la temporada.