Según datos ofrecidos por Unicef y Unesco, el 12% de las personas más pobres (más de 170 millones) saldrían de su situación si todos los estudiantes de sus países tuvieran la escolarización básica. Además, un niño nacido de una madre que sabe leer, tiene un 50% más de posibilidades de sobrevivir pasados los 5 años. Y un año de escolarización incrementa los ingresos de una persona un 10%.

Sin embargo, la realidad nos muestra que más de 59 millones de niños no tienen acceso a la educación primaria, de entre los cuales, 24 millones nunca irán a la escuela. Más del 23% de los niños abandonarán la enseñanza antes de terminar la educación primaria, una tasa que aumenta hasta el 42% en el África subsahariana. Dos veces más niñas que niños de primaria nunca empezarán el colegio. Y el 75% del profesorado no cumple los estándares de formación que requieren las instituciones educativas.

Por estas y otras muchas razones, el acceso a una educación de calidad es un desafío mundial, marcado por el cuarto objetivo de desarrollo sostenible. A través de este objetivo, la ONU propone al mundo trabajar para garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad, y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos.

En esta tarea, el aragonés César Alierta, presidente de ProFuturo y de la Fundación Telefónica, lidera esta área de trabajo como asesor global del Fondo de los Objetivos de Desarrollo Sostenible para la Educación Digital de Naciones Unidas. Además, la ONU va a empezar una línea de trabajo con ProFuturo para mejorar el acceso a la educación.

«César Alierta repite siempre que estamos ante una histórica revolución digital», apunta Sofía Fernández de Mesa, directora general del proyecto ProFuturo. Junto a ello, Alierta «siempre ha tenido un compromiso firme con la educación como vía para erradicar la pobreza en el mundo. Por ello, vio muy claro que había que aprovechar el momento para llevar educación digital a los lugares más vulnerables del mundo. Su implicación es total. Está marcando un ritmo acorde con su altura de miras y su larga experiencia de gestión empresarial de una multinacional como Telefónica», añade la directora de este proyecto educativo.

ProFuturo es la continuación y el refuerzo del compromiso histórico de Telefónica y la Caixa con la educación a través de la tecnología y la innovación.