La familia Pantoja se reúne hoy en la Parroquia de Santiago, en la localidad sevillana de Castilleja de la Cuesta para celebrar el bautizo de la pequeña Carlota, la hija de Kiko Rivera e Irene Rosales. Pero habrá ausencias destacadas: la de los hermanos Francisco y Cayetano Rivera. La mala relación de ambos con Isabel Pantoja, madre de Kiko, es presumiblemente la causa. Tampoco acudieron al bautizo de la primera hija del matrimonio. Entonces, como ahora, alegaron motivos profesionales. Y es que los hermanos mayores de Kiko todavía le piden a la tonadillera las pertenencias que, según ellos, les corresponde de su padre, Paquirri.

Quizás para acallar rumores sobre la relación entre hermanos, Kiko e Irene almorzaron con Cayetano Rivera y las fotos las compartieron en las redes sociales. «Qué buen ratito hemos pasado», escribió el ahora pinchadiscos. Dado que Francisco todavía no había desmentido públicamente su ausencia a esta ceremonia, si finalmente acudiera sería toda una sorpresa.

«Eché de menos a mis hermanos, que tenían que torear, pero que nadie busque problemas donde no los hay, porque estamos más unidos que nunca, y es un placer porque se quedan atrás las cosas malas que hayan podido pasar», declaró a la revista ¡Hola! Kiko tras las ausencias de sus hermanos al primer bautizo.

Aunque esta misma revista será la que se encargue de ofrecer la exclusiva del acto, ya se sabe que la imagen de Kiko sorprenderá, puesto que él mismo se ha encargado de celebrar en las redes que continúa adelgazando desde que se sometió a una operación para bajar de peso, y que ya ha alcanzado los 79 kilos. «¡Objetivo conseguido! Salimos del 8 para entrar en el 7», ha escrito.