Energy Control es un proyecto que, gestionado por la Asociación Bienestar y Desarrollo, realiza diferentes actividades en algunas comunidades autónomas. Uno de los programas que llevaron a cabo el año pasado en Cataluña fue el análisis de diferentes muestras de drogas para conocer el grado de adulteración de las mismas. El 72% de las muestras de cocaína que analizaron estaban adulteradas. En muchos casos con sustancias tóxicas perjudiciales para la salud. Del total de sustancias analizadas, un 32% correspondían a éxtasis, un 30% a cocaína, un 14% a speed y el resto se reparten entre ketamina, LSD, opiáceos y nuevas drogas. En total se analizaron 1.249 sustancias. Dichas muestras se recogen en las puertas de las discotecas o macrofiestas, los fines de semana por la noche, por lo que los resultados nos pueden dar una idea del consumo de drogas que realizan los jóvenes en estos ambientes.

La droga que más se adultera es la cocaína y para su adulteración se suelen utilizar otros fármacos que a menudo son muy tóxicos, uno de ellos la fenacetina, un analgésico que se retiró del mercado por su toxicidad, por su perjuicio para el hígado y que se añade a la cocaína por su aspecto brillante.

Los responsables del programa alertaron también de la existencia en el mercado de pastillas de éxtasis, que presentan dosis cada vez más elevadas, llegando a veces a cuadriplicar las cantidades consideradas menos dañinas. Los estudios sobre estas sustancias dicen que las pastillas de éxtasis no deben superar entre uno y dos miligramos por kilo de peso del consumidor. Esto significa que una persona pesa 60 kilos estaría entre los 60 y los 120. En el 2013 las pastillas de éxtasis que se analizaron y que llevaban como logo una calavera contenían 270 miligramos de éxtasis. Teniendo en cuenta que el policonsumo es otro de los fenómenos que se da en estos contextos el riesgo de presentar problemas graves de salud se incrementa hasta límites desconocidos.

Este mismo equipo detecto el año pasado 33 nuevas sustancias diferentes sobre las cuales no hay estudios y se desconocen sus efectos en el organismo. Desde hace años la cultura del ocio y el entretenimiento de la juventud parece estar ligada a la noche y al consumo de drogas. Algunos jóvenes las utilizan para reducir el sueño y el cansancio, sin pararse a pensar qué se meten en el cuerpo y sus efectos. Más información en: UASA, calle Molino Bajo de Ejea. Teléfono 976677809 y 685909554. E-mail: informaciondrogas@yahoo.es