La del año 2003 ha sido una campaña de batir récords de producción en todas las almazaras de la zona. Así lo confirmaba Juan Carlos Moneo, técnico de Atria, en vista a los resultados obtenidos en la cooperativa del Campo de San Sebastián (COSANSE) donde, según afirma, "nunca se habían recogido tantas olivas".

En las tres zonas de procedencia de los socios de esta almazara -el Jalón, y las riberas del Isuela y del Grío- la producción ha sido espectacular si bien habría que destacar los resultados obtenidos en los olivos de esta última ribera.

Según las previsiones de esta cooperativa a finales de enero, cuando acabe la campaña, se habrán recogido unos 2,5 millones de kilos de olivas de los que saldrán, según las estimaciones realizadas, unos 600.000 litros de aceite. Estas cifras suponen para la cooperativa duplicar el número de litros de aceite y triplicar los kilos de cosecha. A día 7 de enero se habían recogido 1,9 millones de kilos aproximadamente y se habían elaborado 468.000 litros de aceite. Las cifras en la cooperativa de Morata también son destacables ya que, según Emilio Yus, dos días después de empezar el año, se había pesado un millón de kilos de olivas y ya se habían vendido 103.000 litros de aceite.

La misma circunstancia se repite también en la almazara de la SAT Valle del Jalón, donde, a fecha 7 de enero, se contabilizaban 2.052.500 kilos de aceitunas recogidas desde el inicio de campaña. Según explicaba Rafael Josa, esta campaña se extenderá hasta finales de febrero y, supone un incremento del 80% sobre los resultados obtenidos hace dos años. En otra de las almazaras de la comarca, en la cooperativa San Clemente de La Muela, a fecha 5 de enero se habían recogido 915.340 kilos de aceitunas con los que han elaborado 227.000 litros de aceite. Las previsiones apuntan a llegar al millón de kilos de olivas y producir 248.000 litros de aceite para el 20 de enero, a fin de campaña.

La vecería hacía prever este incremento de las cifras con respecto al año anterior pero, sin embargo, las cantidades se han disparado. Desde que comenzara, la campaña se ha desarrollado con normalidad a pesar de los retrasos en el pesado producidos por la saturación de producción. En la SAT Valle del Jalón, se ha llegado a pedir a los socios que no recojan por unos días para evitar el almacenamiento y, en los días de mayor afluencia, se han llegado a pesar 80 ó 90 toneladas. Los picos de entregas más fuertes en la almazara de Cosanse se produjeron el pasado 15 de diciembre, con 107.410 kilos pesados, el 8 de diciembre, con 90.056 kilos entregados, y el 18 del mismo mes, con 84.136 kilos. Estas cantidades han superado incluso la capacidad de molturación de la propia cooperativa, que asciende a 70 ó 75 toneladas diarias.

Aun así, y cumpliendo las exigencias, la molturación se ha producido de forma inmediata. "Si la oliva no se almacena no hay problemas de acidez", explica el técnico de Cosanse. La producción de sus socios se ha movido entre el 0,17 y el 0,23, unas cifras similares a las del resto de las almazaras.

Lo único que ha descendido este año han sido los rendimientos. "La aceituna llega con su peso al 100% porque no ha habido heladas y el rendimiento ha bajado en uno o dos puntos", explica Rafael Josa confirmando los datos recogidos de otras almazaras. Aun así, la calidad de los aceites producidos en la zona está garantizada porque "las aceitunas están muy sanas, con todas sus características organolépticas", apuntaba Josa.