Invierno y chocolate siempre se han llevado bien. Son, podría decirse, amigos de toda la vida. Aunque este año el frío no parece desperezarse, a nadie le amarga una buena taza de chocolate cuando el termómetro desciende. Al abrigo, en buena compañía y con media docena de churros. Hay pocas estampas más invernales, o al menos tan apetecibles.
La provincia de Zaragoza sabe mucho de chocolate. No solo por los turrones, conguitos o lacasitos de Chocolates Lacasa, sino también por las pastelerías y obradores de prestigio que elaboran sus manjares desde distintos puntos del territorio. En la capital aragonesa, sin ir más lejos, podríamos citar varias: Lalmolda, Fantoba, Bombonera Oro, Ascaso o Canfranc. Nombres que seguro conocen todos los que vivan o hayan vivido en Zaragoza.
A nadie le amarga un dulce
Pero tampoco hay que olvidarse de las chocolaterías, esos lugares que buscan endulzar 'in situ' los paladares. De uno de ellos se ha hecho eco la revista Fuera de Serie, especializada en tendencias, moda y gastronomía. La publicación ha elaborado recientemente un ránking de las 10 mejores chocolaterías de España, uno de los 10 países donde más chocolate se consume en el mundo.
Las chocolaterías más destacadas
Las afortunadas de esta lista se ubican en distintos puntos de la geografía nacional, y puede que algunas de ellas suenen en la memoria de los aficionados a las rutas gastronómicas. Aalta Botica en Barcelona o la icónica Chocolatería San Ginés en Madrid son los dos establecimientos que presiden el ránking. El segundo, situado cerca de la Puerta del Sol, es parada imprescindible para quienes visitan la capital, y tal es su éxito que abre las 24 horas del día de miércoles a domingo.
En el caso de Zaragoza, el nombre que se ha hecho un hueco en este limitado ránking es la churrería La Fama, sin duda toda una institución del chocolate en la capital aragonesa. Situada en la calle Prudencio, 25, en pleno Casco Histórico, es uno de los lugares de referencia para los amantes de los churros, que se elaboran a partir de una receta familiar. Y cómo no, regados con un delicioso chocolate a la taza que hace las delicias de los zaragozanos. Para quien lo haya probado, no resulta extraño que aparezca en esta lista. Si se es un laminero, La Fama es un hogar, dulce hogar.
