Sudán

La guerra que se libra en Sudán del Norte no podría entenderse sin tener en cuenta las otros conflictos bélicos, étnicos, tribales, que han venido desangrando a este país en las últimas décadas.

Antes de dividirse en dos (2011), la extensión de Sudán equivalía a la de toda Europa occidental. Todavía ahora, Norte y Sur siguen siendo tan grandes como España y Francia. Aparentemente pobres en superficie, son muy ricos en subsuelos, donde se han descubierto petróleo, oro y uranio.

Sudán del Norte y Sudán del Sur siguen siendo muy desconocidos para la mayoría de europeos, pocos de los cuales, aunque les pueda atraer su exotismo o su historia, se sienten inclinados a visitarlos, dada la inseguridad, los peligros del viaje. Otra manera de visitar Sudán sería leyendo el libro La guerra de Emma, de Deborah Scroggins. En sus páginas se nos narra la fascinante historia de Emma Mc Cune, joven británica que llegaría a compartir su vida con Riek Machar, uno de los líderes guerrilleros de Sudán del Sur que lucharon por la independencia contra los musulmanes del norte, llegando a ser vicepresidente de su primer gobierno.

Scroggins utiliza la biografía de Emma como cooperante en África para invitarnos a conocer mejor la historia reciente de Sudán, Kenya, Etiopía y otros países y clanes, tribus y líderes del Cuerno de África. Remontándose en su reconstrucción histórica hasta el legendario doctor Livingstone y su famosa receta de las Tres cés para «salvar» África: Cristianismo, Comercio y Civilización. O al no menos legendario general Charles George Gordon, «Gordon Bajá», abandonado por Inglaterra y decapitado por los soldados del Mahdi ante las murallas de Jartum en la yihad de 1885.

Una galería extraordinaria de personajes, desde traficantes de armas, como Adnan Khasoggi hasta el fundador de Al-Qaeda Osama Bin Laden, pasando por George Bush (padre), Gadaffi, el emperador Haile Selassie, Carlos el Chacal, Abu Nidal, Turabi o John Garang, todos ellos atravesando los acontecimientos de Sudán o la vida de Enma como los conflictos, hambrunas, emboscadas, bombardeos, ejecuciones, tratados y gobiernos que se suceden hasta el último capítulo de La guerra de Emma, aunque no del término de las guerras en Sudán, que continúan en la actualidad conmocionando al mundo.

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