Raúl de Tomás, máximo artillero de la categoría con 22 tantos, no jugará el sábado en La Romareda contra el Zaragoza. El delantero del Espanyol, que este miércoles se retiró, indispuesto, de la sesión de entrenamiento, anunció ya por la noche que ha dado positivo por covid-19 y, por consiguiente, permanecerá aislado en su domicilio los próximos días. La baja del atacante deja al Espanyol sin su gran referencia cuando está a un solo punto de certificar su retorno a Primera División tras un viaje de ida y vuelta por Segunda.

El Zaragoza se libra, pues, de la gran amenaza de un Espanyol que es el máximo goleador de Segunda con diferencia con 66 tantos marcados en las 37 jornadas disputadas. El registro (cerca de dos goles por partido) es muy superior a la del segundo mejor en este apartado (el Almería, con 53) y de otra dimensión si se compara con el raquítico caudal ofensivo de un Zaragoza que solo ha sido capaz de perforar 28 veces el marco contrario (31 oficialmente debido al 0-3 logrado en los despachos por la alineación indebida del Alcorcón en Santo Domingo). 

De hecho, entre De Tomás (22) y el exzaragocista Puado (11) han marcado más goles que todo el Zaragoza (28), lo que expone claramente tanto la fortaleza ofensiva del líder como la endeblez de un equipo aragonés cuyo máximo artillero, Narváez, acumula ya seis partidos consecutivos sin ver puerta, fundamentalmente, como consecuencia de su desplaza miento a la banda izquierda en la mayor parte de los encuentros. 

Es más, los problemas en ataque son de tal magnitud que los defensas zaragocistas han marcado más goles que una delantera en la que solo Azón (dos tantos en Liga y otro en Copa) y Álex Alegría (1) han inaugurado una cuenta anotadora que sigue a cero en los casos de Vuckic y Toro Fernández. Por el contrario, Vigaray, Chavarría, Tejero, Jair y Peybernes ya han hecho diana entre los defensores.

El severo fracaso de un Zaragoza que, a estas alturas del campeonato, sigue luchando por sobrevivir contrasta con el éxito de un Espanyol que cuenta las horas para certificar su vuelta al Olimpo. El equipo aragonés, mientras, afronta las cinco últimas jornadas con la necesidad de sumar al menos dos victorias más para asegurar su permanencia en la categoría de plata y no caer al abismo. Y el Espanyol, sin Raúl de Tomás, es la siguiente piedra en el camino. La más grande. 

Positivo confirmado

En la tarde del miércoles, el Espanyol anunció la detección de un positivo en covid-19 en las pruebas de antígenos realizadas a la plantilla que posteriormente se confirmó a través de PCR. La duda era si la indisposición de Raúl de Tomás podría estar relacionada con ese positivo, algo que el propio futbolista se encargaría de despejar después. «He dado positivo por covid-19. Aunque tengo algunos síntomas leves, me encuentro bien» indicó el jugador, que lamentó su ausencia en el partido que puede sellar el ascenso del Espanyol. «Aunque desearía con todas mis fuerzas estar en La Romareda y ayudar a mis compañeros, animaré al máximo desde casa con la ilusión de que podamos culminar el objetivo», expuso en sus redes sociales .

El goleador era la gran amenaza para un Zaragoza que, sin embargo, no es presa fácil cuando juega en casa. De hecho, es el equipo menos goleado de la categoría como local desde que JIM tomó las riendas con solo dos tantos encajados en los nueve encuentros disputados en La Romareda. Y uno de ellos, el marcado por el Alcorcón (0-1) fue obra de Cristian Álvarez en propia puerta. Así, únicamente un jugador rival (Robertone, del Almería) ha logrado hacer un gol al Zaragoza en su estadio en los últimos cuatro meses y medio o en 810 minutos.

Ni siquiera los otros dos depredadores del área de la categoría, Sadiq (Almería) y Djurdjevic (Sporting) han sido capaces de celebrar un gol en La Romareda, feudo que se ha convertido en inexpugnable incluso para los equipos con mayor arsenal ofensivo. Ni el balcánico ni el nigeriano cantaron victoria en feudo zaragocista. Y, en ambas ocasiones, un chaval de apenas 18 años ejerció como herramienta letal de resistencia: Alejandro Francés, que no podrá medirse ante De Tomás. Sin el madrileño, el exzaragocista Puado será la gran referencia de los catalanes.