James Igbekeme va a ser la segunda salida de este mercado de enero tras la de Clemente, que fue cedido al Sanse hasta junio. El nigeriano ha rechazado ir al Moreirense, de la Primera lusa, porque tiene ya dado el sí a un club de la MLS, de la Major League Soccer, la máxima categoría del fútbol americano. Este equipo será el Columbus Crew, según algunas fuentes. En su primer año en el Zaragoza, Toronto FC y Seattle Sounders estuvieron tras sus pasos, sobre todo el club canadiense, que llegó a ofrecer hasta dos millones de dólares por su fichaje en 2019, propuesta que fue rechazada. El centrocampista ha decidido marcharse aunque Miguel Torrecilla, director deportivo, no le pidió, como sí hizo con Adrián, Eguaras y Ros, que se buscara equipo.

Según algunas fuentes, el jugador ha estado el fin de semana ya en Estados Unidos y la firma de los contratos es inminente, aunque esta mañana de lunes sí se ha entrenado con el resto de sus compañeros en la Ciudad Deportiva. El viernes no estuvo en La Romareda, ni de corto ni en la grada en el amistoso ante el Andorra. Su salida, a falta de la confirmación, sería en forma de cesión, aunque conllevará una opción de compra por un futbolista que acaba su vínculo con el Zaragoza en 2023.

James ya estuvo en la rampa de salida en verano, pero su buen comienzo de pretemporada y su cambio de mentalidad convencieron a Juan Ignacio Martínez, que le dio camiseta de titular en los tres primeros partidos, para después contar con el nigeriano solo de forma esporádica e irregular y sin que el centrocampista se acercara al gran nivel que dio en su primera temporada en el Zaragoza.

Entonces, recién llegado de Gil Vicente en el verano de 2018 con un traspaso de 150.000 euros hizo una gran campaña en la 18-19 y al término de esa Liga el Zaragoza tuvo varias ofertas por él, rechazadas, también la del Granada, que llegaba a los 4 millones por el 50% del pase del nigeriano. Sin embargo, tras traspasar a Pep Biel la posición de Víctor Fernández, entonces entrenador, fue contraria a vender a James y el club mantuvo al jugador, al que las lesiones, hasta ocho contratiempos de diferente índole, aunque la mayoría musculares, lastraron en las dos siguientes campañas, 19-20 y 20-21. Con JIM no terminó como fijo el curso pasado y ahora tampoco lo es, aunque el técnico sí confía en que puede dar un rendimiento mayor. Esta temporada ha jugado en 12 partidos de Liga, ocho de ellos de titular, y dos de Copa, con 616 minutos en total. Tras volver del parón, no jugó en Anduva ante el Mirandés y después estuvo una semana sin entrenarse con el equipo