La actualidad del Real Zaragoza

Víctor Fernández: "Tengo contrato de entrenador, con eso respondo todo"

El técnico pide paciencia hasta la próxima semana, donde "se acelerará todo", confirma que continuará en el banquillo, ya que "veo un proyecto ambicioso y positivo, que busca el renacer del Zaragoza y ascender”, y no dará el salto a los despachos. "Hice el contrato con esa otra posibilidad, puedo aportar ahí, pero yo soy entrenador"

Le abre la puerta de par en par a Ander Herrera, que "aportaría liderazgo e ilusión" y también ensalza a Francés, al que ve como el mejor jugador de la plantilla y "es vital", aunque asegura que "en el Zaragoza estará el que quiera estar y esa es la primera piedra del éxito"

Víctor dialoga con Insausti, preparador de porteros, y David Navarro, su segundo. en el entrenamiento de este viernes.

Víctor dialoga con Insausti, preparador de porteros, y David Navarro, su segundo. en el entrenamiento de este viernes. / JAIME GALINDO

El entrenador del Real Zaragoza, Víctor Fernández, seguirá siéndolo la temporada que viene en el club aragonés y no dará el salto a los despachos. Al menos no ahora. Era la primera hoja de la margarita que debía caer para dar marcha a un proyecto que para él es "muy ambicioso y positivo" y, a partir de la semana que viene, "se va a acelerar todo" en cuanto a salidas, llegadas y decisiones con futbolistas concretos. El entrenador también admitió que el fichaje de Ander sería de una gran aportación y elogió a Francés, al que juzgó "vital y uno de los mejores jugadores del Zaragoza, si no el mejor", aunque abrió la puerta a su salida al asegurar que en el equipo "estarán los que quieran estar".

La primera piedra de la temporada que viene era Víctor y, si bien no dijo claramente que se queda, sí que lo reconoció y lo dejó claro con otras palabras: "Tengo contrato, con eso lo respondo todo. Habrá matizaciones y cosas que enfocar bien de cara al futuro, pero hay que tener paciencia". El proceso está en marcha. Conozco a los inversores, estoy en relación con ellos y la semana que viene se acelerará todo. Veo un proyecto ambicioso y positivo, que busca el renacer del Zaragoza y ascender”, aseguró el entrenador, que hace poco más de un mes aseguraba solo conocer a Raúl Sanllehí, director general, y Mariano Aguilar, consejero, además de Cordero, director deportivo, pero también no haber hablado con nadie más de la propiedad, tampoco por ejemplo con Jorge Mas, presidente y uno de los accionistas.

"Necesitamos la ayuda de todos, cada uno desde su posición en el club, así el proyecto tendrá posibilidades de éxito. Debemos ser humildes y ambiciosos, tener capacidad de autocrítica para aceptar lo que se ha hecho mal, corregir y mejorar"

A partir de entonces se trata de construir un proyecto que a Víctor, pese a la cantidad de movimientos que hay que hacer, le tiene "absolutamente ilusionado", dijo con contundencia, para desgranarlo después: "Igual soy un poco loco o inconsciente. En este proyecto debemos embarcarnos absolutamente todos, en mayúscula. Necesitamos la ayuda de todos, cada uno desde su posición en el club, así el proyecto tendrá posibilidades de éxito. En la otra ocasión que empecé la temporada (19-20) ya tuve claro que debemos ser humildes y ambiciosos. Humildes significa tener capacidad de autocrítica para aceptar lo que se ha hecho mal, corregir y mejorar, y ambiciosos, porque ha habido años de decepciones. No debemos renunciar a nada. Somos el Real Zaragoza, un equipo de Segunda, con categoría de Primera"

"El diseño de la estrategia es vital para mí, el cómo lo vas a hacer, la capacidad de sorpresa y de adelantarnos que tengamos, que es posible que no sea la misma que hace 4 años, o el reparto económico de los fichajes que hagas", recalcó el técnico, que en esa misma línea destacó que "el 75 % del éxito deportivo depende de una extraordinaria gestión, acertar en la mayoría de incorporaciones que hagas, en el 80 %, tener un buen entrenador y hay circunstancias que no puedes controlar en una temporada como las lesiones".

"Soy entrenador. Esa es la sustancia de mi contrato, la línea maestra, para tener la oportunidad de volver a luchar por el ascenso. Hice el contrato con esa otra posibilidad, tengo experiencia en organización y asesoramiento puedo aportar también ahí, pero a día de hoy más como técnico"

Con todo, no quiso marcarse tiempos en la toma de decisiones en la plantilla y la configuración del proyecto, porque “eso no depende de mí. Los tiempos, como en todas las empresas, los marca la propiedad, no los voy a marcar yo. Y soy consciente de que se van a acelerar mucho las cosas la próxima semana, principalmente el diseño de la estrategia a seguir", recalcó, admitiendo después la información adelantada el domingo por este diario, ya que tiene la opción de dar el paso a los despachos, renunciando a ese año de contrato, por un vínculo de tres en un cargo de asesor de la dirección general y de representación del club. "Yo soy entrenador. Esa es la sustancia de mi contrato, la línea maestra, para tener la oportunidad de volver a luchar por el ascenso. Hice el contrato con esa otra posibilidad, tengo experiencia en organización y asesoramiento (fue director de la cantera del Real Madrid durante dos años), puedo aportar ahí, pero yo soy entrenador. Es donde más puedo aportar a día de hoy en el Zaragoza”, sentenció, para dejar muy aclarada que esa opción del despacho no la va a ejecutar.

Ander y Francés

"Ander sería un jugador de un nivel altísimo, fortísimo, para nosotros, con experiencia, y una pasión zaragocista tremenda. Aportaría liderazgo e ilusión, aunque no sé cómo está la situación"

En cuanto a nombres propios, Víctor le dejó la puerta más que abierta a Ander Herrera para su regreso a La Romareda: "No es un jugador del Real Zaragoza y tiene contrato con su club. Sería un jugador de un nivel altísimo, fortísimo, para nosotros, con experiencia y una pasión zaragocista tremenda. Aportaría liderazgo e ilusión, aunque no sé cómo está la situación. Se acelerarán las cosas la próxima semana", reiteró, lo que en el caso de Ander es también una realidad a la espera de la llamada definitiva del Zaragoza al jugador, que desea volver y que tiene al Athletic esperando la respuesta a la propuesta de renovar un año más. El centrocampista regresaría al equipo que le vio dar sus primeros pasos tras llegar en alevines desde el Amistad y del que se fue en 2011, firmando por el mínimo salarial, pero LaLiga computaría 760.000 euros al Zaragoza. Todo eso, sea para regresar o para quedarse en el Athletic, se debe resolver la próxima semana.

Y la postura no es tan abierta a la salida de Francés, al que aduló y mimó en sus palabras dos días después de hablar con él en el comienzo del entrenamiento del miércoles. "La conversación fue futbolera, de la selección, de los Juegos. Es muy zaragocista y uno de los mejores jugadores, si no el mejor de la plantilla. Conmigo lo he visto más brillante, el mejor Francés de la temporada, asumiendo responsabilidad. Es un jugador vital, muy zaragocista y lo quiero mucho, pero no le he preguntado del futuro, aunque tiene un año de contrato, con sus obligaciones y derechos", expresó Víctor, que también dijo, por dos veces, en su respuesta sobre el canterano la misma aseveración, que quizá no venía demasiado a cuento. "En el Zaragoza estará el que quiera estar y esa es la primera piedra del éxito, estar a full. El que no quiera estar, no me interesa", señaló. Lo cierto es que Francés, con un año más de contrato, con clubs interesados en Primera, el Alavés sobre todo, pero hay alguno más, apunta de forma muy clara a no renovar y salir este verano.

Víctor también habló algo más en clave de futuro, porque ese proyecto ambicioso e ilusionante tiene también que tomar decisiones dolorosas. “Hay que tomar decisiones frías y cerebrales, las que sean mejores para el Zaragoza. Y llevan consigo temas dolorosos sobre determinados jugadores. No nos podemos dejar llevar por el corazón y el sentimiento. No podemos dudar. No tenemos más dinero que nadie y el atractivo del Zaragoza no es el mismo que hace diez años, pero podemos volver a vender un viaje maravilloso para todos”, reflejó, en una comparecencia donde se habló casi en todo momento en clave de futuro y mucho menos de pasado.

"Estábamos en el quirófano y hemos salido con vida y es eso lo que te permite mirar al futuro. Yo no voy a utilizar la palabra fracaso. Me ha tocado vivir tres meses muy jodidos, pero el equipo no se ha rendido nunca"

En ese pasado y tras una temporada tan gris a la que él llegó como tercer técnico en marzo, Víctor eludió hablar de fracaso en este curso. "Cuando llegué el Zaragoza estaba a vida o muerte. Las últimas diez jornadas siempre son muy difíciles de jugar y más con un calendario terrible, tantas bajas y una presión en los partidos de casa que no tienen los demás rivales de abajo. Estábamos en el quirófano y hemos salido con vida y es eso lo que te permite mirar al futuro. Yo no voy a utilizar la palabra fracaso. Me ha tocado vivir tres meses muy jodidos, pero el equipo no se ha rendido nunca, es lo único que no se nos puede reprochar, la falta de actitud. ¿Estoy contento? Sí, por tener vida. ¿Satisfecho? No, claro que no estoy satisfecho y que se podría haber hecho mejor. Pues sí y también conmigo", incidió.

"Queremos ganar y despedirnos de un estadio que deja un trozo de historia. Tiene una carga emocional tremenda. En Gol Sur se han vivido momentos maravillosos. Me recuerdan a mi infancia, cuando nos colocaban en esa zona. A ver si somos capaces de tener respeto a la historia y hacerlo con esa victoria"

Con respecto al partido ante el Albacete aseguró que, con las bajas, la última de Valera, apostará por un once muy reconocible, sin rotaciones, más allá de algún cambio puntual porque "quiero ganar. Algún cambio habrá, pero no lo que se entiende por rotaciones y cambiar a la mayoría del equipo. Hemos salvado la vida, pero queremos terminar bien la temporada, como se merece nuestra afición”, aseveró, hablando también de ese epílogo en La Romareda en el que será el último partido con el Fondo Sur tal y como se le conoce desde 1957, con el derribo que tendrá lugar a principios de julio para dar los primeros pasos en la construcción de la nueva Romareda: "Llegamos al último partido con la obligación de dar un buen espectáculo y conseguir un buen resultado para la gente. Hemos logrado el objetivo y queremos despedirnos de un estadio que deja un trozo de historia. Tiene una carga emocional tremenda. En Gol Sur se han vivido momentos maravillosos. Me recuerdan a mi infancia, cuando nos colocaban en esa zona. Se nos irá una parte de la historia del estadio, que ha vivido tardes y noches muy especiales. A ver si somos capaces de tener respeto a la historia y hacerlo con esa victoria".