La Fiscalía ultima un recurso de apelación contra la decisión del juez de lo Penal número 1 de Granada. Al igual que la defensa de Juana Rivas, el Ministerio Público da por perdido el trámite de reforma ante Manuel Piñar y busca apurar los tiempos para lograr una decisión que permita que la madre de Macarena (Granada) pueda estar libre en unos días y pasar las Navidades con sus hijos.

Así han informado a El Periódico de España fuentes fiscales, que destacan que la prioridad es lograr la libertad de Rivas --condenada por la sustracción de sus dos hijos menores--, ya que ello le supondrá poner beneficiarse del indulto parcial que le concedió el Gobierno de Pedro Sánchez

La Fiscalía es consciente de que acudir en reforma no tendría más consecuencia que retrasar una solución definitiva, pues es más que previsible un segundo rechazo del juez y además el asunto no llegaría a la Audiencia de Granada hasta después de las fiestas. El recurso se está ultimando y podría presentarse antes de finales de esta semana, teniendo en cuenta además que al tratarse de causa con preso debe resolverse con carácter preferente.

En cuanto a las duras manifestaciones vertidas Piñar en su auto del pasado viernes, que sorprendieron tanto por el tono como por incluir un asunto --el de los presuntos abusos a uno de los hijos de Rivas-- que ya había sido sobreseído por la justicia, serán contestadas con contundencia y también "con educación", según las mismas fuentes.

Por su parte, el recurso presentado por la defensa ejercida por el abogado Carlos Aranguez, que se extiende a lo largo de 28 páginas, solicita a la Audiencia la revocación del auto y la concesión de la suspensión de los meses de pena de prisión que aún restan cumplir a Rivas. Ello permitiría a la madre de Macarena pasar todas las vacaciones de Navidad con sus hijos tal y como ha autorizado la justicia italiana.

Razones falsas

En cuanto al contenido del recurso, la defensa destaca que la suspensión de pena es un acto discrecional, pero no arbitrario, por lo que debe ser motivado. Incide que Piñar ha denegado la suspensión de la pena por tres razones falsas, que llega a calificar de "absolutamente inventadas".

 Según el juez Rivas no se ha arrepentido; repitió la misma conducta tras ser condenada España y; lo que ha causado más estupefacción para esta parte, su libertad supondría un aparente peligro para los menores, puesto que ciertos documentos de la causa "arrojan indicios de abusos sexuales a uno de los menores cuando estaban bajo su custodia". Se trata de unas afirmaciones que a juicio de Aranguez son "crueles y temerarias".

La defensa descarta acudir al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) para exigir responsabilidad disciplinaria al juez cuando se resuelva este asunto, y subraya en su recurso que Piñar lude pronunciarse sobre las múltiples circunstancias que aconsejan la suspensión de pena que Rivas está terminando de cumplir en un centro de reinserción.

Requisitos legales

Por otra parte, el recurso destaca se cumplen todos los requisitos legales para conceder la suspensión y además concurren circunstancias que aconsejan conceder este beneficio, pues Rivas es delincuente primaria (no tiene antecedentes), la pena es de quince meses de prisión ha abonado los 12.000€ de indemnización a su marido Francesco Arcuri.

Otras razones que según la defensa aconsejan la suspensión es que Juana Rivas tiene trabajo estable, una red de apoyo familiar, suficiente formación académica y carece de adiciones o trastornos mentales que deban ser tratados, unas circunstancias que el juez que la condenó a cinco años de cárcel por la sustracción de sus hijos -rebajados posteriormente a la mitad por el Tribunal Supremo--, ni entra a valorar en su polémico auto.

 Precisamente por todas estas acreditadas razones los Servicios Penitenciarios han clasificado a la mujer en tercer grado penitenciario, decisión ratificada por el Juez de Vigilancia Penitenciaria de Granada." Si existiera peligro social, como afirma el Ilmo. señor Piñar, no se le habría otorgado la más favorable modalidad de cumplimiento penitenciario", agrega el recurso. La petición de suspensión ha sido apoyada por el propio exmarido, por lo que el juez decidió en contra de todas las partes personadas en esta causa.

Daño irreparable

Finalmente, la defensa señala que la denegación de la suspensión de pena causa un irreparable perjuicio a Rivas y a sus hijos si éstos no pueden pasar Navidad juntos. Dice también el recurso que, al ser esta mujer víctima de violencia de género, hay que entender que en el momento de desaparecer con los menores se encontraba muy afectada por el proceso de victimización que estaba denunciando.

La decisión de Piñar ha impedido, de facto, la aplicación de la medida de gracia que fue concedida de forma parcial por el Ejecutivo, una decisión que levantó polémica al tratarse de un caso mediático enmarcado en el apoyo que esta mujer ha obtenido en los últimos años por parte de grupos feministas y de la propia ministra de Igualdad, Irene Montero.

Por lo que se refiere a los citados abusos, cuya mención en el auto ha supuesto exponer la situación del niño al debate público, fueron sobreseídos en marzo de 2018 por "no resultar debidamente justificada la perpetración del delito", sin que desde dicha fecha haya aparecido indicio ni prueba alguna que permita afirmar lo contrario o haya obligado a una reapertura de las actuaciones. 

La decisión se basó en un informe de la Guardia Civil de 58 páginas, al que ha tenido acceso este diario, y en el que tras analizar los informes médicos valorar las declaraciones de la madre, el pediatra, la profesora de la guardería de Camarena (Granada) a cargo del niño y de familiares de la mujer, los agentes concluyen que "no se han encontrado indicios que indiquen la insistencia de los presuntos abusos sexuales investigados".

 En cuanto al papel adoptado hasta el momento por del Ministerio público, la fiscal del caso en Granada asumió el criterio favorable a la suspensión de la pena de Juana Rivas que fue estable en una reunión al más alto nivel, presidida por la fiscal general del Estado, Dolores Delgado. Y ello a pesar de que en un principio se negaba a apoyar la suspensión de los meses que restaban de la condena, ya que no creía conforme a derecho que se pudiera invocar el interés de los menores para que no entrara en prisión, pues los niños habían sido víctimas del delito de secuestro.

 Los hechos probados de la sentencia contra Juana Rivas señalan que en mayo de 2016 Juana Rivas viajó a España con sus dos hijos y no regresó a Carloforte (Italia), donde llevaba conviviendo tres años con su entonces pareja. Tras varios requerimientos para que devolviera a sus hijos, el 26 de julio de 2017 Rivas se ocultó con ellos, y su expareja denunció la desaparición. Rivas entregó a los dos niños un mes después, el 28 de agosto de 2017, en la Comandancia de la Guardia Civil de Granada.