Diego P. M, de origen colombiano, ha reconocido este martes en la Audiencia de Zaragoza que realizó tocamientos a un niño y, tras un acuerdo entre las partes, ha conseguido así una notable reducción de la condena, que le evitará entrar en prisión. Esta se ha quedado en dos años, en lugar de los cinco solicitados por Fiscalía y la acusación particular, ejercida por la letrada María Fornoza.
Los hechos ocurrieron en 2021 en la capital aragonesa, en un domicilio particular, y la víctima fue un niño de 11 años.
La reducción de la pena ha sido posible gracias a que el acusado se ha beneficiado de la aplicación de dos circunstancias atenuantes: reparación parcial del daño causado y drogadicción.
Daños morales
El imputado, en efecto, abonó antes de la fecha fijada para la vista oral, la cantidad de 500 euros, a cuenta de una responsabilidad civil que asciende en total a 3.000 euros, en concepto de daños morales.
La condena contempla asimismo la prohibición de acercamiento a menos de 200 metros del menor durante un plazo de tres años, así como otro periodo de cinco años de libertad vigilada una vez cumplida la pena impuesta.
Por otro lado, en la fase de ejecución de la sentencia deberán resolverse dos solicitudes de la defensa, en el sentido de que no se prive de pasaporte al acusado, dado que tiene hijos viviendo en el extranjero, y que se suspenda la pena impuesta por carecer de antecedentes y ser esta no superior a los dos años.
