La vida está muy cara. La inflación ha elevado los precios de los bienes, la luz y el gas también están muy altos, más que hace un año o dos mismamente, y tampoco los carburantes escapan a las subidas. De hecho, ahora mismo no se atisba el final de las subidas y cada vez se van superando los registros anteriores.
Llenar el depósito se ha convertido en un gasto muy grande. Si antes llenar el coche podría estar en unos 60 euros, ahora fácilmente se puede llegar a los 100 si es de gasolina con un tanque normal tirando a grande. La diferencia es abismal.
Por eso también cada vez más personas están optando por repostar en las gasolineras low cost, que aprovechan el autoservicio y la falta de necesidad de personal para ofrecer precios más bajos. Lo cual, a la larga, acaba notándose en el bolsillo, como los 'gastos hormiga'. Y también hay otros trucos, como elegir bien el día en el que repostar, siempre y cuando se pueda elegir.
Si emprendes un viaje y te quedas sin combustible porque es largo, no te va a quedar más remedio que darle de beber para poder seguir funcionando, no queda otra. Pero si tienes opción, hay días en los que es algo más barato.
Diferencia considerable
No es que sea una diferencia sustancial ni que vaya a cambiar tu vida, pero sí que, ahora que cada litro cuenta más que nunca, ayudará a que te ahorres unos euros en cada repostaje. Y uno, tras otro... grano no hace granero, pero muchos sí.
Los carburantes también están sujetos a la ley de la oferta y la demanda, lo que quiere decir que los precios bajan si hay mucha oferta y poca demanda y suben si es el caso contrario, aunque también hay que contar con los impuestos o con los costes de producción y transporte, que en el caso del crudo además va a haber afecciones por la guerra en Ucrania.
El caso es que el fin de semana es cuando más se reposta, porque las personas hacen escapadas, vuelven a casa, se mueven más y, por tanto, hay más demanda. Es decir, lo más común es que los viernes a primera hora los precios hayan subido. En cambio, los lunes bajan un poco, por lo que entre semana te será más barato repostar. Aunque recuerda, todo depende de la situación internacional y puede ser que no sea siempre así.
