El Ayuntamiento de Zaragoza ha iniciado el traslado de los ocho gatos que residían entre los restos del teatro romano. Un lugar privilegiado del centro de la ciudad que abandonarán (a la fuerza) para mudarse hasta el extrarradio, hasta los Pinares de Venecia donde se sigue trabajando en la construcción de un recinto habilitado para los felinos, El Guano.

Por ahora se han capturado dos gatos ferales de la colonia que compartirán campa con los de los depósitos de Pignatelli, una vez que se localicen.

En lunes por la mañana aparecieron rotas las jaulas de readaptación ubicadas en El Guano y con los candados bloqueados con silicona. También se detectaron destrozos en las vallas y mallas del recinto. Unos actos vandálicos que ya están siendo investigados y por los que se ha intensificado la vigilancia en la zona.