Las Fallas han vuelto a las calles de Valencia entre medidas, restricciones y limitaciones que van a permitir disfrutar de unas fiestas que recuerdan a una vida anterior a la pandemia. Desde Zaragoza, el consistorio las mira de reojo porque hay eventos que tienen importantes similitudes con los Pilares, como la ofrenda.

La consejería de Sanidad ha establecido un protocolo muy riguroso y habrá un máximo de cuatro falleras por fila (cinco si se trata de niños) que tendrá que guardar 1,5 metros de distancia entre ellas y llevar la mascarilla, incluido el público que se va a reducir para evitar aglomeraciones.

No son las únicas medidas porque en todos los eventos, celebraciones y concentraciones solo podrán desarrollarse hasta las 00.30 horas, la mascarilla será obligatoria tanto en espacios cerrados como abiertos, y quedan prohibidas las verbenas, discomóviles, karaokes y actuaciones esporádicas o amateurs y no se podrá bailar ni en interiores ni en exteriores.

Son algunas de las medidas que podrían aplicarse en Zaragoza en caso de que se celebren las fiestas del Pilar. Se decidirá el próximo jueves en una reunión que ha convocado el Gobierno de Aragón aunque el mensaje que lanzó a través de sus redes sociales el presidente aragonés, Javier Lambán, ha generado cierto malestar en la casa consistorial y bastante incertidumbre.

Para Lambán es un riesgo planificar los Pilares «como si hubiera vuelto la normalidad», a pesar de que Sanidad estaba al tanto de los planes (al menos a grandes rasgos) del consistorio, que defiende que las licitaciones de los grandes eventos deben realizarse con tiempo para poder cumplir con los plazos administrativos.

Valencia y Valladolid, en fiestas

El presidente autonómico recibió algún que otro mensaje en el que le recordaban que Valencia o Valladolid sí habían recibido la autorización para celebrar sus fiestas patronales. Fue el caso del coordinador autonómico y portavoz del grupo parlamentario de Ciudadanos en las Cortes de Aragón, Daniel Pérez, que cuestionó que ni Lambán ni la portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Zaragoza, Lola Ranera, criticasen a Ximo Puig, presidente en la comunidad valenciana, que ya en mayo anunció que los valencianos recuperaría su fiesta y que adecuarán las restricciones a la situación del momento.

Según los datos del Ministerio de Sanidad, la incidencia acumulada a siete días en Valencia es de 63,3 casos de covid por cada 100.000 habitantes. En la Comunidad Valenciana ascienden a los 84,97. En Aragón es de 119,5 y en Zaragoza de 104,9.

En Valladolid, con el socialista Óscar Puente al frente de la Alcaldía, la incidencia acumulada a siete días es de 144 casos por cada 100.000 habitantes. Las fiestas de la Virgen de San Lorenzo, del 3 al 12 de septiembre, también van a estar marcadas por las restricciones y el aforo será limitado en todos sus eventos, el uso de la mascarilla obligatoria y para poder acudir a los conciertos programados en la plaza Mayor, con un límite de 1.000 personas, hay que solicitar una invitación.