Parece que las continuas llamadas al diálogo y al consenso por parte de todos los grupos en el Ayuntamiento de Zaragoza no surten efecto. Cuatro días después de que la concejala de Hacienda, María Navarro, presentara su propuesta de modificación de las ordenanzas fiscales (los impuestos que recauda el consistorio) todos los partidos de la oposición salieron este jueves para ponerle alguna pega al plan de PP y Cs. La izquierda reclama más progresividad y equidad a la hora de cobrar los tributos y Vox alertó de que si el alcalde, Jorge Azcón, no escucha sus reclamaciones, tendrán que «acudir a la Justicia».

 El primero en reaccionar al proyecto de ordenanzas de Navarro fue el concejal Alberto Cubero, de ZeC. Según criticó, la bonificación del IBI para las empresas que se asienten en Zaragoza, siempre que compren suelo municipal, solo persigue incentivar la venta de «patrimonio público para enjuagar las cuentas» del consistorio. «Eso es lo único que buscan. Si las compañías se instalan en suelo privado la bonificación es de la mitad y si lo que se persigue es la creación de empleo no tiene sentido. Habría que bonificar a todos por igual», pidió a la vez que anunció que ese será el sentido de los votos particulares contra las ordenanzas que presentará ZeC, que como el resto de grupos tiene 15 días para trasladar sus enmiendas.

Acusan a Azcón de buscar "la foto"

Asimismo, Cubero denunció que no resulta justo que se bonifique el IBI a las empresas que más empleo generen, siendo el descuento de hasta el 95% si la compañía en cuestión tiene más de 200 trabajadores. «La mayoría de las empresas de la provincia de Zaragoza, el 98%, no cuenta con más de 20 trabajadores, por lo que la propuesta de PP y Cs deja a la mayoría fuera. Azcón solo busca hacerse la foto para decir que es él el que atrae inversiones», lamentó.

Además, ZeC presentará también otro voto particular para pedir que se tenga en cuenta la calidad del empleo que generen las empresas y otros criterios como la igualdad y la sostenibilidad a la hora de bonificar los impuestos municipales.

La portavoz del PSOE, Lola Ranera, fue la segunda en discordia. La socialista, aunque anunció que más adelante marcarán su postura concreta sobre todas las modificaciones fiscales que plantean PP y Cs, criticó que, mientras la bajada del IBI solo va a suponer un descuento en el recibo de «dos euros al año», el consistorio esté planteando aumentar las zonas azules y naranjas, lo que supone «meter la mano en los bolsillos» de los vecinos de los barrios que tendrán que pagar por aparcar su coche.

Después pasó por la sala de prensa Fernando Rivarés, de Podemos, que fue si cabe más tajante que sus predecesores a la hora de calificar el plan fiscal de la concejala Navarro. «Hemos analizado la propuesta con mucho detalle y la verdad es que hemos alucinado bastante. La propuesta es mentira y las rebajas fiscales que plantean son inaplicables», dijo.

La propuesta de la responsable de Hacienda supone una rebaja del IBI del tipo general del 0,87% para dejarlo en el 0,4087, una cifra que se aplica al valor catastral de las viviendas para calcular lo que hay que pagar por este tributo cada año.

Podemos propone bajarlo aún más y dejarlo en el 0,4, el mínimo legal, para la mayoría de los zaragozanos y subir el tipo a todos los inmuebles con un valor catastral de más de 700.000 euros, ya que, dijo Rivarés, estos están en manos de supermercados y grandes bancos y pueden pagar más impuestos.

La rebaja anunciada, (del 0,87%) no palia la subida anual del valor catastral de los inmuebles, que aumenta cada año desde que en 2013 el Gobierno de Mariano Rajoy reformara cómo se calcula este parámetro. Por ello cree que se tendría que bajar aún más el IBI y así, aunque no bajase, «por lo menos se congelaría».

Por otro lado, Rivarés pidió no rebajar el Impuesto de Actividades Económicas, que se cobra a las empresas que facturan más de un millón de euros, «ya que pueden pagarlo y se lo desgravan ante el Gobierno de España». «Tienen que contribuir a la hucha común para poder fortalecer los servicios públicos», pidió el portavoz morado.

Ante las críticas, la responsable de Hacienda, María Navarro, recogió el guante y compareció también ante los medios para defender su postura que solo busca, dijo, incentivar la creación de empleo. «Cualquier persona con sentido común lo apoyaría o mejoraría en su caso», enfatizó, y recordó que la izquierda no bajo el IBI tanto como ellos. De todas formas, la del PP se comprometió a estudiar las ideas de la oposición.

Pero Navarro no solo lo tendrá complicado a su izquierda, sino también a su derecha. Vox, en su intento constante por mostrar su fuerza, presentó este jueves en el registro del ayuntamiento una reclamación formal dirigida al alcalde «por la falta de tramitación de dos proposiciones normativas presentadas en octubre de 2020» a las ordenanzas del año pasado. Si no hay respuesta, los ultras «acudirán a la Justicia», lo que no parece ser el mejor escenario a la hora de sentarse a negociar.

El PSOE denuncia ‘el parkingazo’

La portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Zaragoza, Lola Ranera, denunció este jueves ante los medios de comunicación que mientras el equipo de Gobierno de PP y Cs vende una bajada de impuestos pretenda extender las zonas azules y naranjas para aparcar los coches por toda la ciudad.

Según explicó Ranera, la empresa encargada de realizar un estudio que sirva de base para redactar los pliegos del futuro contrato de las zonas de estacionamiento regulado ha hecho llegar a las juntas de distrito una propuesta en la que el número de plazas de pago se elevaría hasta las 20.000 en toda la ciudad de las 6.700 que existen en estos momentos. La socialista bautizó esta operación como el parkingazo.

«Es posible que sea necesario extender las zonas azules y naranjas en algunas vías comerciales de los barrios pero de ahí a triplicarlas... Azcón no es consciente de que hay una parte de la ciudad, la que no vive en Salamero o en Santa Engracia, que residen en barrios populares y que no se pueden permitir pagar todos los días por aparcar su coche en la calle», criticó. Sin embargo, desde el equipo de Gobierno de PP y Cs niegan que el aumento de las plazas vaya a ser tal.

Por el momento, se están redactando los pliegos del nuevo contrato de las zonas de estacionamiento regulado (el actual caduca el 31 de octubre) y se están estudiando las necesidades de los barrios. No se ha decidido que vaya a haber 20.000 plazas de pago, aseguran, y, en todo caso, esa cifra será el máximo que se pueda alcanzar, pero no necesariamente la que tenga que haber desde el principio. El actual contrato plantea, por ejemplo, 10.000 plazas de las menos de 7.000 habilitadas. 

El Debate del Estado de la Ciudad será el 28  y el 29 de octubre

El Debate del Estado de la Ciudad de Zaragoza se celebrará durante los días 28 y 29 de octubre. Así lo acordaron los portavoces de todos los grupos hace ya algunos días, por lo que el calendario para acabar con el ejercicio de 2021 sigue su curso. El alcalde será el primero en intervenir en el pleno con su discurso anual, en el que se espera que marque las líneas de actuación principales de su equipo de Gobierno ahora que quedan menos de dos años hasta las siguientes elecciones. Los grandes proyectos que no comiencen a trabajar ya no estarán listos para entonces por lo que los anuncios tendrían que empezar ya a sucederse. Por la tarde será el turno de los partidos y entonces podría cobrar especial relevancia el papel de la vicealcaldesa, Sara Fernández, de Cs. Ya el año pasado quiso reivindicar las aportaciones de los naranjas a la coalición y ahora, con los comicios más próximos, es posible que marque aún más sus diferencias con el PP para posicionarse ideológicamente de cara a las urnas y definir su espacio.