La nueva Romareda y el Mundial 2030. El Mundial 2030 y la nueva Romareda. Ambos proyectos van de la mano en el Ayuntamiento de Zaragoza, si bien en el pleno de este viernes se debatieron por separado, aunque acabaron convergiendo para hablar de lo mismo. Una cosa no podrá ser sin la otra: sin estadio nuevo, la capital aragonesa no podrá ser sede del campeonato de España y Portugal. Aunque si al final la FIFA no elige a la Península Ibérica, el campo seguirá siendo una necesidad. Este viernes los partidos han vuelto a posicionarse al respecto.

Sobre el Mundial 2030 presentó una moción Podemos para solicitar al Gobierno de Aragón (del que la formación morada forma parte) que proponga formalmente a la ciudad de Zaragoza como sede para la candidatura del campeonato de fútbol de España y Portugal. Todos los partidos votaron a favor de esta propuesta menos Zaragoza en Común.

«Odio el fútbol moderno», dijo el concejal de ZeC, Alberto Cubero, en su turno de palabra. Cubero defendió así su voto en contra de la moción, puesto que considera que el mundial servirá de excusa para que la construcción de la nueva Romareda se convierta en un macroproyecto que dé lugar a la especulación y el beneficio de los intereses privados. Los de ZeC defienden que no se construya un nuevo campo, sino que se reforme el actual.

Más allá del debate, el titular del día sobre el nuevo estadio lo dio, como no podía ser de otra manera, el alcalde, Jorge Azcón. El regidor explicó que el jueves estuvo hablando con el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, que sigue pendiente de que la Real Federación Española de Fútbol le haga llegar los requisitos que se van a exigir para poder presentar las candidaturas. Cuando llegue el momento, eso sí, dijo el regidor, la capital aragonesa estará preparada.

Y es que ya casi ha terminado el «proceso de escucha» en el que están participando numerosos agentes económicos y sociales, un grupo de trabajo que se creó para debatir sobre la ubicación y el modelo de estadio para Zaragoza, por lo que en los próximos meses el equipo de PP y Cs podría tener ya claro qué hacer, aunque no se sepa todavía cómo pagarlo.

"La mayoría" prefiere la actual ubicación

Un día más, Azcón dejó clara su preferencia: que el estadio se quede donde está. Y saltándose algún que otro paso, el alcalde dijo que parece que «la mayoría» de las personas que están interviniendo en estas reuniones «dicen que lo idóneo» es que el campo se mantenga en su actual ubicación. No obstante, el mismo jueves, los arquitectos opinaron que era mejor llevarse el estadio fuera.

Por su parte, el concejal de Urbanismo, Víctor Serrano, solicitó de nuevo la colaboración al Gobierno de Aragón, que teme que se quede «fuera de la foto» si trata de estirar los tiempos en los que debería avanzar el proceso de decisión sobre el estadio. El de Cs pidió a la DGA que desvele ya hasta dónde piensa implicarse económicamente.

Pero este viernes el pleno del Ayuntamiento de Zaragoza ha tenido que votar también la modificación de créditos propuesta por el equipo de PP y Cs para poder hacer frente a los trabajos de adecuación del actual estadio de La Romareda. El campo municipal acogerá el 24 de septiembre un partido oficial de la Liga de las Naciones entre España y Suiza, pero para ello primero necesita pasar por chapa y pintura para cumplir con los requisitos en materia de seguridad y servicios que exige la Real Federación Española de Fútbol.

Serrano ya explicó hace varias semanas que el coste de los trabajos se había estimado algo menos de medio millón de euros que, por otra parte, no se habían presupuestado en las cuentas de este 2022. Es por ello que el equipo de PP y Cs propuso una modificación de créditos para mover 400.000 euros y poder afrontar el pago de los trabajos que se requieren en La Romareda. Y para sorpresa de todos, dado que esto de la unanimidad no suele ser habitual, todos los grupos votaron a favor de la modificación.

Dinero que no se iba a usar

El motivo es, quizás, la procedencia del dinero con el que se van a pagar las obras de La Romareda. Más de 100.000 euros proceden de una partida que no se va a gastar y que iba a destinarse a descontaminar los suelos en los que se ubicarán las futuras piscinas de La Almozara. Pero resulta que los suelos no están contaminados, por lo que no hace falta limpiarlos. Y otros 300.000 euros vienen de las obras para acondicionar los accesos al colegio de La Merced, que se habían estimado más caras y para las que no hará falta tanto dinero.

El único debate que suscitó esta modificación fue la fórmula escogida para ejecutar los trabajos, que se llevarán a cabo mediante un convenio con el Real Zaragoza para que sea el club el que se encargue de contratar las obras. Podemos y ZeC afirmaron que, lo propio, hubiera sido licitarlos. 

Mejorar el sistema de iluminación de La Romareda costará 180.000 €

Las obras necesarias para que La Romareda acoja un partido de la Roja se centrarán en la adecuación de la climatización de los vestuarios del equipo local, visitante y de los árbitros; en las salas de control de dopping y médica se colocará un espejo de control en el aseo y una nueva puerta de separación con el pasillo, además de limpiar, sanear y pintar la sala médica. Además, en la grada de animación del fondo norte se retirarán las butacas existentes y se colocarán 1.450 con respaldo y una nueva ubicación de personas con movilidad reducida con 15 plazas dobles. En la sala de prensa se mejorará el mobiliario con mesas tipo encimera y en n la zona de palco se hará un repaso de albañilería y pintura en gradas. Casi la mitad de la inversión total, unos 180.000 euros, serán para la iluminación del terreno de juego, que en la actualidad son focos de lámparas de halogenuros metálicos, por lo que no tiene la posibilidad de encendido instantáneo en caliente en caso de corte del suministro eléctrico.