El Ayuntamiento de Zaragoza volverá a ajustar los horarios de encendido y apagado del alumbrado público para reducir el consumo energético y reducir la factura de la luz. Una medida que ya se puso en marcha a finales de marzo y que ahora, con las horas de luz propias del verano, puede ampliarse otros 20 minutos que generarán un ahorro de hasta 6.000 euros diarios, que variarán en función del precio de la luz, ahora disparado.
Desde el Gobierno de PP-Cs estiman que el coste energético a finales de año alcance los 45 millones de euros, más del doble de lo que se pagaba antes de que el precio de luz empezara a subir de forma desorbitada como consecuencia de la invasión de Ucrania y la imparable inflación. El año pasado ya fue de 26 millones.
Que el ayuntamiento no tenga un contrato con una empresa suministradora de energía y acuda al mercado diariamente, como acordó el anterior Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC), no ayuda a la hora de reducir la factura, y se ha generado un importante agujero económico en las arcas municipales. Para hacerle frente, Hacienda decidió destinar parte del remanente de 2021 al pago de la luz, hasta 7,1 millones de euros que se asignaron a un fondo para hacer frente a los sobrecostes derivados de la inflación y al alto precio de la energía.
El gasto del alumbrado público
Gran parte de este gasto tiene que ver con el encendido de las farolas, con un consumo de 52.538.366 kwh y un coste anual estimado para este año de 18,8 millones de euros. En 20202, cuando los precios de la luz eran algo más razonables, el gasto era de 7,8 millones, la friolera de once millones menos.
Así que el ayuntamiento zaragozano (y el resto de instituciones) se han visto en la obligación de adoptar medidas para reducir el consumo y el gasto y dar respuesta a los avisos que llegan desde Bruselas sobre la necesidad de impulsar acciones encaminadas al ahorro energético ante la más que previsible falta de suministros durante el próximo invierno.
Las primeras medidas
A finales de marzo el ayuntamiento ya decidió adelantar 15 minutos el apagado de las luminarias y retrasar 5 minutos su encendido. Tan solo 20 minutos que suponen un ahorro diario de 2.976 euros, es decir, 360.000 euros en cuatro meses.
Ahora, con el horario de verano, los técnicos calculan que existe un margen de otros 20 minutos que principalmente, al amanecer, donde se observa más capacidad para adelantar el apagado de las luces.
En total, 40 minutos más con las farolas apagadas que reducirán en 6.000 euros diarios el gasto energético, otros 900.000 euros la factura a finales de año, dependiendo de los cambios en el precio de la luz. A esta cuantía habría que sumar el ahorro que suponen el resto de medidas que se han adoptado en la casa consistorial. Por ejemplo, ya en marzo se decidió reducir el número de elementos monumentales que se iluminan por las noches, lo que supondrá un ahorro estimado de 250.000 euros anuales.
También se ha adecuado la climatización de los edificios públicos con el propósito de reducir su consumo o, que este, sea más eficiente y lógico y rebaje la factura en unos 500.000 euros al mes.
Con todas las acciones impulsadas desde el consistorio, que se irán adecuando y revisando periódicamente, se estima que el ahorro energético total a finales de año sea de 2,1 millones de euros.
